La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) entregó formalmente al gobierno argentino las condiciones que debe cumplir si quiere ingresar a esa organización que engloba, regula y condiciona con regímenes democráticos a las mayores economías del mundo.
La organización también dio muestras de apoyo a la política de ajuste fiscal del gobierno de Javier Milei. Eso sí, aclaró que “será un proceso doloroso” y que los resultados “tardarán en dar frutos”, según la economista jefe de la OCDE, Clare Lombardelli.
La notificación de los requisitos para ingresar a ese organismo la recibió la canciller Diana Mondino de manos del secretario general, el australiano Mathias Cormann. El acto tuvo lugar durante una ceremonia celebrada durante una reunión de ministros de Asuntos Exteriores en la sede de la organización en París.
“El proceso se ha acelerado de manera muy significativa en los últimos cuatro meses (…) Ahora el trabajo comienza en serio”, afirmó Mondino, que viene de una maltrecha agenda diplomática y comercial en China.
Según Mondino, pese a las exigencias de la OCDE, Argentina establecerá “sus propias políticas” a partir del texto que recibió hoy.
Chile, Costa Rica, Colombia y México son los únicos países latinoamericanos que forman parte de la organización fundada en 1961 y cuyos 38 miembros representan alrededor del 80 por ciento del comercio y las inversiones globales.
Argentina expresó en 2016, durante el gobierno de Mauricio Macri, su deseo de ingresar a la OCDE. La organización tardó seis años en iniciar este proceso de discusiones. Esperó hasta el final del gobierno de Alberto Fernández, con quien había sostenido “conversaciones positivas”, según Cormann.
Mondino recibió el documento llamado “hoja de ruta” que establece genéricamente las modalidades y condiciones, pero sin definir una fecha para su ingreso. La OCDE realizará primero revisiones en áreas como el comercio, la inversión, la lucha contra la corrupción y el cambio climático.
“Se trata de trabajar en todos los estándares y mejores prácticas de la OCDE para ayudar a Argentina a mejorar su crecimiento económico y la vida de su población”, dijo Cormann.
“Será un proceso doloroso”
La política económica del ultraliberal Javier Milei también recibió el apoyo de la economista jefe de la OCDE, Clare Lombardelli, durante la presentación de las perspectivas económicas de la organización.
“El gobierno está aplicando ahora una política fiscal y monetaria muy restrictiva para controlar la inflación. Es lo que hay que hacer, pero llevará tiempo para que dé frutos”, afirmó Lombardelli.
Para la economista británica, reducir la inflación “es la prioridad para ayudar a las personas que han sufrido momentos realmente duros”, pero reconoció que esto “será, por supuesto, un proceso doloroso”.
Según el informe de la OCDE, la contracción de la economía argentina caerá un 3,3 por ciento en 2024, un punto más de lo proyectado anteriormente. Para el año que viene se habla de un repunte del 2,7.
En cuanto al índice de precios al consumidor, el organismo económico estima que la inflación será de 208,1 por ciento en 2024 y que caerá 71,2 en 2025.
“La alta inflación, el ajuste fiscal considerable pero necesario y la incertidumbre política pesarán sobre el consumo privado y la inversión durante la mayor parte de 2024”, estima el informe.
Sin embargo, la OCDE pide continuar con “la consolidación fiscal anunciada” y estima que “las reformas previstas para aliviar las cargas regulatorias, mejorar el entorno empresarial y abrir la economía al comercio internacional” contribuirán “a frenar la pobreza”.
“No hay nada que facilite más y ponga a las personas en mejores relaciones que eliminar el flagelo de la inflación”, afirmó Mondino, quien abogó por establecer “reglas claras” para promover el “crecimiento” y el “desarrollo”.
