El expresidente Donald Trump asistió el jueves al velorio del asesinado oficial del Departamento de Policía de Nueva York, Jonathan Diller, quien, según las autoridades, fue asesinado a tiros mientras realizaba una parada de tráfico a principios de esta semana.
“Lo que pasó es un acontecimiento muy, muy triste, algo tan horrible”, dijo Trump a los periodistas después.
En breves comentarios, reiteró sus condolencias por la muerte de Diller y aprovechó el velorio para centrarse en un mensaje frecuente en la temporada de campaña sobre el crimen y la seguridad pública.
“Tenemos que detenerlo. Tenemos que detenerlo”, dijo Trump. “Tenemos que volver a la ley y el orden. Tenemos que hacer muchas cosas de manera diferente, porque esto no está funcionando”.
Según las estadísticas de delincuencia de la ciudad de Nueva York para el mes de febrero, “los incidentes de tiroteos, asesinatos y otros delitos en la ciudad de Nueva York se redujeron notablemente en febrero en comparación con el mismo mes del año pasado”.
El departamento continuó informando que la delincuencia general en los cinco condados “continuó su trayectoria descendente, cayendo otro 1,1%”.
El lunes, el oficial Diller se acercó a un vehículo estacionado ilegalmente con otro oficial y les pidió a los dos sospechosos, Lindy Jones y Guy Rivera, que movieran su auto, según la policía. Las autoridades dicen que los dos hombres se negaron a bajar las ventanillas y, en lugar de mostrar las manos como se les pidió, Riviera supuestamente le disparó a Diller.
Diller fue trasladado de urgencia al hospital donde murió.
El jueves temprano, Rivera, de 34 años, fue acusado de asesinato de un oficial de policía, intento de asesinato y posesión criminal de un arma. Se desconoce el momento de su arresto, ya que permanece en el Hospital de Jamaica, donde está siendo tratado por una herida de bala en la espalda después de que el compañero de Diller le disparó después de que supuestamente disparó su arma. No está claro si tiene un abogado que pueda comentar en su nombre.
Jones, de 41 años, está acusado de posesión criminal de un arma y posesión de un arma de fuego desfigurada. Durante una comparecencia ante el tribunal el miércoles, los fiscales destacaron su historial violento y su falta de citas ante la corte al argumentar a favor de su detención sin derecho a fianza.
La jueza María González estuvo de acuerdo en que Jones presenta un riesgo de fuga y lo puso en prisión preventiva. Tampoco está claro si tiene un abogado.
La fiscal de distrito de Queens, Melinda Katz, asistió a la lectura de cargos en una sala repleta de agentes de policía, incluido el jefe de patrulla John Chell.
Ambos sospechosos tienen un largo historial criminal: Jones, quien ha tenido 14 arrestos anteriores, incluidos intento de asesinato y robo, estaba en libertad bajo fianza en relación con un delito separado, indican los registros policiales. Rivera fue arrestado previamente por la policía de Nueva York 21 veces, según registros policiales.
Trump aprovechó el jueves el hecho de que los sospechosos acusados en relación con el asesinato de Diller tienen antecedentes penales.
“No aprenden porque no respetan. No es así”, dijo Trump sobre Rivera y Jones. “No se les respeta, la policía es la mejor gente que tenemos. No hay nada ni nadie como ellos y esto nunca debería suceder”.
El martes, Trump, quien también conmemoró repetidamente a los policías asesinados mientras estaba en la Casa Blanca, publicó en su plataforma de redes sociales para lamentar la muerte de Diller y criticar al presunto tirador, destacando sus arrestos anteriores.
Trump también habló por teléfono con la familia del oficial mientras estaban en una funeraria el martes.
Después del velorio del jueves, Trump habló sobre reunirse con la esposa de Diller y su hijo, y dijo que su bebé “no sabe cómo ha cambiado su vida”.
La aparición de Trump también se produce el mismo día de la recaudación de fondos del presidente Joe Biden en Nueva York, que se planeó mucho antes del velorio del jueves. En la recaudación de fondos, a Biden se unirán los ex presidentes Barack Obama y Bill Clinton. Se espera que el evento recaude una suma “histórica” para un solo evento con más de 25 millones de dólares, según la campaña de Biden.
Se espera que la recaudación de fondos conjunta de Trump y el Partido Republicano en Palm Beach, Florida, la próxima semana recaude al menos 33 millones de dólares, dijeron a ABC News fuentes familiarizadas con el evento.
La campaña de Trump arremetió contra Biden por su “ostentosa recaudación de fondos” con partidarios “elitistas” el jueves, aunque la Casa Blanca ha dicho que Biden habló con el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, para compartir sus condolencias por el asesinato de Diller y ofrecerle el apoyo que fuera necesario.
El expresidente, que ha estado pasando tiempo alejado de la campaña electoral, estuvo en Nueva York a principios de esta semana para una audiencia judicial en su juicio penal allí sobre pagos de dinero para mantener su silencio a Stormy Daniels. Él niega haber actuado mal.
En el camino, Trump ha acusado con frecuencia a los fiscales de centrarse en perseguirlo en lugar de intentar combatir los delitos violentos en la ciudad, una afirmación que los fiscales rechazan. Ha utilizado la muerte del oficial Diller para enfatizar este punto mientras critica el crimen en la ciudad de Nueva York.
