La Universidad de Buenos Aires (UBA) declaró emergencia presupuestaria y decidió restringir los servicios de electricidad y gas en espacios comunes. La medida se tomó en las 13 facultades, mientras que en Odontología y Derecho se decidió realizar clases en las escalinatas del edificio, a modo de protesta.
Las medidas que está llevando a cabo la UBA responden a la decisión del Gobierno de Javier Milei de extender los valores presupuestarios de 2023 a 2024. Ante esta situación, este miércoles el vocero presidencial, Manuel Adorni, sostuvo que las universidades “ No van a cerrar” y aseguró que se dio seguimiento a la “solicitud de aumento de partida presupuestaria”.
Es por esto que, a partir de este lunes, se redujo el uso de ocho ascensores en el edificio de Odontología a dos para los 18 pisos del establecimiento. Además de esto, también se restringió el uso de electricidad en lugares comunes.
El decano de la Facultad de Odontología, Pablo Rodríguez, explicó en diálogo con TN el motivo de esta decisión: “El Consejo Superior emitió la resolución de emergencia presupuestaria. En ese contexto, ayer surgió un dictamen del rectorado de que restrinjamos la electricidad en los espacios comunes, el gas, los ascensores, situación que nos complica mucho porque con el funcionamiento del hospital aquí circulan 2.500 personas por día entre pacientes y odontólogos.
“Aquí hay ocho ascensores, cuatro a cada lado. Estamos analizando abrir uno o dos de cada sector, es decir la mitad o el 30%. La realidad es que a veces ocho no son suficientes y ahora va a ser peor. Este recorte nos complica”, añadió.
En cambio, en la Facultad de Derecho se da una situación similar. Desde el lunes, las autoridades y docentes de la institución comenzaron a tomar algunas medidas para quejarse por la falta de presupuesto. El decano de Derecho Leandro Vergara pidió que hoy se resuelvan los problemas presupuestales que llevaron a la Universidad de Buenos Aires a estar en emergencia y llamó a sumarse al reclamo: “Tenemos que mostrarlo, visibilizarlo”.
En esta línea, ha explicado que, aunque el Gobierno amplió el presupuesto un 70% más, “todavía queda mucho”. “Eso es sólo una parte, hay que tener en cuenta la tasa de inflación del 300% en un año, las reducciones presupuestales son visibles, no hay manera de sostener el mantenimiento de la universidad con ese nivel de presupuesto”, lamentó. Y agregó: “Tenemos 52 mil metros cuadrados, vamos a tener que restringir al máximo todo lo lujoso”.
Ante esta situación, fue el mismo portavoz presidencial quien aseguró que las universidades “no van a cerrar”. Y agregó: “Ya lo he aclarado en otras ocasiones, (las universidades) no tienen riesgo de perder temas en cuanto a sus estudios académicos”.
