El curioso proyecto que frena el regreso de la temida energía nuclear

El curioso proyecto que frena el regreso de la temida energía nuclear
El curioso proyecto que frena el regreso de la temida energía nuclear

Los océanos esconden una enorme y enorme fuente de energía que, poco a poco, empezamos a comprender. Este proyecto español de conquista de los mares lo deja claro, pero no es el único. ¿Te imaginas ver turbinas de viento bajo el mar? Es precisamente la idea que se ha puesto sobre la mesa y que podría frenar el medio más controvertido hasta la fecha: la nuclear, con sus centrales que están lejos de ser renovables.

Un país que enfrenta un duro dilema: retroceso o avance energético

Históricamente, Japón ha enfrentado una elección energética difícil. Por un lado, el país carece de recursos fósiles y tradicionalmente ha dependido de la energía nuclear para satisfacer gran parte de su demanda de electricidad. Pero después del desastre nuclear de Fukushima en 2011, la opinión pública cambió drásticamente.

No sólo podríamos clasificar la energía nuclear como peligrosa e insegura, sino que también es una fuente no renovable. Esta es la línea que históricamente ha mantenido la AIE (Agencia Internacional de la Energía) y que, hasta hace poco, defendía la Unión Europea:Las cosas han cambiado con la crisis energética del continente—.

En los últimos años, el gobierno japonés ha intentado reducir gradualmente su dependencia de la energía nuclear sin comprometer el suministro energético del país. En este contexto, las energías renovables como la eólica marina han cobrado especial relevancia como alternativa viable y socialmente aceptada.

De hecho, Japón está impulsando ambiciosos proyectos de parques eólicos flotantes en mar abierto, con el objetivo de aprovechar su enorme potencial eólico marino y acelerar la transición hacia un sistema energético más sostenible y seguro, utilizando una fuente inagotable como nuestros océanos.

Un proyecto para llenar los océanos de turbinas eólicas

El proyecto Kairyu es uno de los intentos más ambiciosos de Japón para aprovechar la energía eólica marina. Kairyû, cuyo nombre significa “corriente oceánica” en japonésconsiste en un parque eólico flotante experimental ubicado frente a la costa de la prefectura de Fukushima.

El parque está formado por un aerogenerador flotante de 2 megavatios (MW) de capacidad, con una altura total de más de 100 metros. La turbina está conectada a la red eléctrica a través de un cable submarino. El diseño flotante permite que la turbina se mueva libremente con las olas y corrientes del océano.

Kairyû es el primer parque eólico marino a gran escala de Japón y un paso importante en los esfuerzos del país por expandir la generación de energía renovable. El proyecto piloto busca demostrar la viabilidad técnica y económica de la tecnología eólica flotante en mar abierto.

La energía eólica marina, una fuente que debemos seguir explorando

La energía eólica marina tiene varias ventajas importantes en comparación con las fuentes de energía convencionales. En primer lugar, es una fuente de energía renovable y limpia. A diferencia de los combustibles fósiles como el carbón o el gas natural, el que abordamos no produce emisiones nocivas.

Además, el viento es un recurso inagotable. Mientras haya viento, es posible generar electricidad sin agotar los recursos finitos. El sol también proporciona un recurso renovable a través de la energía solar, pero la ventaja del viento es que está disponible las 24 horas del día.

Otra gran ventaja es que se puede generar energía a gran escala con parques eólicos marinos. Las turbinas modernas son muy eficientes y pueden suministrar electricidad a miles de hogares. A diferencia de la energía solar, que depende del clima, los vientos marinos suelen ser más fuertes y constantes.

Por supuesto, el turbinas submarinas Nos van a salvar de recurrir a soluciones desesperadas y caminos fáciles (ya sabes de lo que hablamos). Lo que está por ver es si seremos capaces de instalarlos a gran escala para cubrir la demanda eléctrica de países enteros, algo que de momento parece complicado. De cualquier manera, tal vez esta nueva energía creada por la inteligencia artificial pueda arrojar algo de luz.

 
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