Javier Castillo estrena a lo grande su nueva novela en Málaga

“Quería hacerlo en mi país, quería que la presentación fuera contigo y que viniera mi familia, mi hermano… Gracias por estar aquí”, dijo sonriente el escritor. Y asi fue. Junto a sus hijos, su esposa, sus suegros, su hermano y muchos amigos que quisieron acompañarlo. Desde el primer momento y hasta el último mantuvo su conocido buen sentido del humor junto al periodista de SUR Francisco Griñán, quien dirigió la conversación en este Aula SUR, un encuentro patrocinado por Fundación Unicaja y Cervezas Victoria y que en esta ocasión contó con el apoyo de Málaga Procultura y Suma.

“Ésta es su mejor novela”. Así lo confesó tajantemente el director literario de Suma, Gonzalo Albert. Posteriormente también la catalogó como “la más tierna y conmovedora”. Con ello, el autor cierra un ciclo y asegura que ya se despide del personaje de Miren Triggs. «¿Puedo llorar?», interrumpió al recordar este final. «Se me hizo muy difícil escribir el último epílogo porque sabía que me despediría de Miren por mucho tiempo y por ahora será definitivo porque ella es un personaje perfecto ahora mismo. Esta es una forma honesta de decirle adiós, aunque quizás dentro de 20 años me encantaría que volviera…”, dejó caer.

Escribir es su pasión y eso es algo que se refleja en las páginas de sus libros, de ahí el sentimiento de tristeza al terminar una novela y más aún ésta que cierra la historia con la que comenzó su gran éxito mundial. «Creo que he dejado todas mis emociones en esta novela; Ahorita estoy vacío, no sé ni cómo sentirme”, dijo sinceramente Castillo. No pudo revelar mucho sobre la novela, pero sí tuvo varios momentos de confesión respecto a sus sentimientos: «Escribir sobre mis miedos me ayuda a afrontarlos. La vida ha cambiado para mí desde que me convertí en padre… Esta novela trata sobre la desaparición de un niño de siete años y mi querida hija Gala tiene esa edad. La realidad es que ser padre me ha enseñado las emociones más puras que existen y me ayuda a escribir sobre el miedo irracional, el amor incondicional…», explicó.

Un lenguaje universal

“¿Por qué los lectores están tan interesados ​​en los crímenes?” Le preguntó Francisco Griñán. Y esa era una pregunta que está directamente relacionada con “escribir sobre los miedos”. Al fin y al cabo es sólo un lenguaje universal. «Estamos cada vez más divididos y tenemos más distancia entre culturas, pero la realidad es que a todos nos fascinan las mismas cosas y tenemos los mismos miedos, como que nuestros hijos no lleguen cuando salgan del colegio o que pase algo a nuestro socio cuando regrese. a casa. En cambio, los crímenes nos interesan porque hablan de lo que no somos y de algo muy diferente que nos hace pensar qué haríamos en esa situación, eso nos llama la atención”, explicó el escritor.

Para cerrar esta trilogía no abandona los “elementos nostálgicos” que aparecen constantemente. La cinta VHS, la cámara Polaroid ya presente en las anteriores y ahora el casete. «Me gusta dar ese toque de nostalgia en estos momentos que estamos constantemente mirando las pantallas; “Me da miedo esa sensación de perder el control rápidamente cuando estás 15 minutos mirando fotos y en realidad solo habías cogido el celular para responder un mensaje”, reflexionó.

Ese es uno de los propósitos de la lectura, salir por un momento de la pantalla y profundizar en la historia. Eso fue lo que hicieron ayer muchos de los asistentes, que apenas levantaron sus móviles durante el encuentro del Aula de Cultura SUR. Luego sí prendieron los móviles porque llegó el momento de la firma de libros y, por supuesto, no podían faltar los ‘selfies’ y vídeos para inmortalizar el momento con Javier Castillo, que vuelve a ser profeta en su tierra y abrió en Málaga el crack que cierra su trilogía.

Aquí está la presentación completa: