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Los registros oficiales un día después del derrumbe cuentan nueve muertos, 821 heridos y 127 personas atrapadas.
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Varias plantas de TSMC han sufrido daños que afectan a su estructura y también a algunos equipos de chips
Hace poco más de 24 horas un terremoto de magnitud 7,4 sacudió la costa este de Taiwán. Como os explicamos ayer, este es el terremoto más destructivo de todos los que han afectado a esta región. durante los últimos 25 años. Las primeras cifras contaban cuatro personas muertas y más de 700 heridos, pero, desgraciadamente, los registros oficiales un día después del derrumbe contabilizan al menos nueve muertos, 821 heridos y 127 personas atrapadas entre los escombros de los 28 edificios derrumbados.
La región más afectada por el terremoto es la zona de Hualien, y aunque la mayoría de las fábricas de semiconductores de TSMC y UMC están ubicadas en el extremo occidental de Taiwán, muchas de sus plantas se vieron obligadas a detener la fabricación de semiconductores. durante seis horas. Ayer DigiTimes Asia confirmó que la planta Tainan N3 y la fábrica de Hsinchu, ambas propiedad de TSMC, habían sufrido daños importantes que afectaron a la estructura del edificio y a las líneas de producción. Hoy sabemos algo más.
El equipo de litografía ultravioleta extrema no ha sufrido daños
La buena noticia es que las plantas de IC de TSMC y UMC ya han retomado la fabricación de chips con cierta normalidad. Aunque todavía no está del todo claro, los primeros informes no identifican daños estructurales importantes en los edificios más allá la degradación de algunas columnas y paredes. Sin embargo, lo más valioso que tienen los fabricantes de semiconductores no son los edificios que albergan sus fábricas; Su recurso más preciado y caro es el equipo de litografía que utilizan para producir chips de última generación.
Un portavoz de TSMC confirmó que las máquinas SVU y sus otros equipos críticos de producción de chips no han sufrido ningún daño.
Buena parte de las plantas de TSMC en Taiwán están equipadas con máquinas de litografía ultravioleta extrema (UVE) producidas por la empresa holandesa ASML. Cada una de estas máquinas cuesta aproximadamente 150 millones de euros, y una planta de producción de chips de última generación suele reunir decenas de estos equipos altamente sofisticados. Afortunadamente, un portavoz de TSMC ha confirmado que las máquinas SVU y otros equipos críticos de producción de semiconductores de sus fábricas no han sufrido ningún daño.
Sin embargo, esto no significa que todos los equipos involucrados en la fabricación de circuitos integrados hayan salido ilesos del terremoto. El comunicado oficial de TSMC sostiene que sus equipos críticos no han sido dañados, pero Wen-Yee Lee, periodista de semiconductores en Taipei, dice que algunas máquinas han sido dañadaspor lo que varias fábricas están funcionando al 70% de su capacidad de producción, y otras, las más modernas, como Fab 18, al 80%.
En estas circunstancias, lo más razonable es suponer que las fábricas que han sufrido daños materiales tardarán varias semanas en recuperar el 100% de su capacidad de producción. Y esto inevitablemente degradará en cierta medida la cadena de suministro global a corto y medio plazo, aumentando el precio de algunos chips y condicionando su disponibilidad. No hay que pasar por alto que TSMC tiene actualmente una cuota de mercado superior al 50%, por lo que su papel en la cadena de suministro global ligada a la industria de los semiconductores es fundamental.
Imagen | ASML
Más información | Digitimes Asia
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