El desempleo en Chile no cesa y continúa su tendencia ascendente, que se ha consolidado con un decimosexto incremento anual consecutivo. El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha informado este jueves de que la tasa de desempleo nacional correspondiente al trimestre diciembre 2023 – febrero 2024 ha alcanzado el 8,5%. La cifra representó un aumento de 0,1 puntos porcentuales en doce meses.
El informe del organismo estadístico chileno ha explicado que el aumento del desempleo se debe a que el aumento de la fuerza laboral -que se define como personas en edad de trabajar que tienen capacidad de estar empleadas o desempleadas- alcanzó el 3,2% , cifra superior a la presentada por los ocupados, que puntuaron un 3,1%. Esta variación se ha mantenido en los últimos informes, donde también se ha observado presión sobre la fuerza laboral sobre la capacidad de ocupación del mercado laboral.
Los parados aumentaron hasta el 4,9%, cifra en la que influyó el 4,5% de los desempleados y el 8,5% de los que buscan empleo por primera vez. Respecto al mismo periodo del año anterior, las tasas de participación y ocupación se ubicaron en 62,3% y 57,0%, creciendo 1,4 puntos y 1,2 puntos respectivamente. Por su parte, la población fuera de la fuerza laboral disminuyó un 2,7%.
Entre las mujeres, la tasa de desempleo se situó en el 9,0%, sin cambios en doce meses, como consecuencia del aumento a partes iguales de la población activa y de las mujeres ocupadas (4,2%). Entre los hombres, el paro fue del 8,1%, con un aumento de 0,2 puntos. En doce meses, como consecuencia del aumento de 2,5% de la fuerza laboral, superior al 2,3% registrado por los ocupados, al mismo tiempo, los desempleados aumentaron 5,5%.
Los sectores que contribuyeron al aumento del empleo durante el trimestre analizado fueron el comercio (8,3%), las actividades de salud (4,9%), la enseñanza (4,3%) y el alojamiento y restauración (5,1%), mientras que, por categoría ocupacional, el aumento se observó en asalariados formales (3,0%) y trabajadores por cuenta propia (3,0%).
El empleo informal -trabajo que no está protegido por la legislación laboral chilena- alcanzó el 27,4%, con un aumento de 0,1 puntos en un año. El número de personas ocupadas en esta forma de empleo aumentó un 3,3%, afectado tanto por mujeres (5,1%) como por hombres (1,9%). Los sectores más asociados a la informalidad fueron el comercio (8,8%) y la agricultura y pesca (9,6%).
En la Región Metropolitana, donde se ubica la capital Santiago de Chile, la tasa de desempleo alcanzó el 9,3%, con un descenso de 0,4 puntos en doce meses. En el mismo período, la estimación de la población ocupada total creció el 2,2%. Comercio (12,2%), educación (4,7%) y abastecimiento de agua (50,7%) fueron los sectores que más contribuyeron a la ocupación regional.
Las cifras de empleo se conocen en medio de un intenso debate sobre la generación de empleo y la informalidad. La Ministra de Trabajo, Jeannette Jara, había declarado en una reunión sindical que los empleadores deberían pagar mejor para que sus empleados pudieran soportar el aumento del costo de la vida. A esta discusión se suma la grave crisis laboral que afecta a la siderúrgica Huachipato, ubicada en la sureña región del Biobío, que ha paralizado sus funciones ante el asedio de la competencia del acero chino.
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