En un panorama económico de constante transformación, Colombia puede aprovechar para convertirse en un destino atractivo para la inversión extranjera.
(Lea: La inversión extranjera aumentó un 16% durante 2023).
Si bien el país ha tenido desafíos en materia de inflación, cambios de gobierno e incertidumbre económica, según el último informe del Banco de la República, en 2023, en la inversión extranjera acumulada para Colombia los flujos de IED sumaron USD $17.183 m (4,8% del PIB), cifra superior en US$ 264 m a la registrada en 2022.
(Ver: Minas y canteras: sector con mayor inversión extranjera directa en el primer semestre).
Para analizar esta situación que se vive en todo el mundo, OBS Business School publica el informe Inversión Extranjera Directa, dirigido por el profesor de la escuela Rodrigo Yagüe. Muestra las tendencias de inversión en las diferentes regiones del mundo, señalando cuáles son las más activas, hacia dónde han dirigido sus inversiones y qué países están siendo los mayores beneficiarios. Sin embargo, nos centraremos en América Latina y la propia Colombia.
En primera instancia, es importante explicar qué es la IED. En palabras de Yagüe, es “un factor importante de productividad y un pilar de la cooperación internacional entre economías. “A través de ella se crean vínculos económicos de largo plazo que impulsan el desarrollo de los países, especialmente de las economías emergentes”.y agrega que “Los beneficios para el país receptor se ven sobre todo en la generación de empleo, la transferencia de tecnología, el desarrollo de infraestructuras y el estímulo de la actividad económica”.
Panorama latinoamericano de la inversión extranjera directa
Según el informe de la OBS, Brasil fue el principal país receptor de la región (41% del total), seguido de México (17%); Ambos recibieron más IED que en 2021, aunque el aumento de los flujos de IED en Brasil fue mayor y explica el 56% de la variación interanual de toda la región.
(Además: Por qué los traders apuntan a los bonos de la deuda colombiana).
De este modo, “América del Sur fue la subregión que registró el mayor incremento en los flujos de IED respecto a 2021. El Estado Plurinacional de Bolivia fue el único país que no tuvo un aumento en esta subregión, donde los principales países receptores, además de Brasil, fueron Chile , Colombia, Argentina y Perú” dice Yagüe.
Tanto Colombia como Perú han experimentado una evolución similar de los flujos de inversión extranjera, donde han experimentado un moderado descenso hasta 2020, año donde la IED cayó drásticamente. Sin embargo, durante 2021 y 2022 ambos países han tenido una recuperación muy sustancial en la recepción de capital extranjero.
En 2023, la inversión extranjera para Colombia tuvo un mejor desempeño, contribuyendo con el 4,8% del PIB. Durante el cuarto trimestre de 2023, los flujos de IED (US$ 3.946 m) se destinaron principalmente a financiar proyectos productivos en las actividades económicas de manufactura (US$ 1.075 m, 27%), servicios financieros y empresariales (US$ 936 m, 24% ), minería y petróleo (738 millones de dólares, 19%), electricidad, gas y agua (362 millones de dólares, 9%) y comercio, restaurantes y hoteles (361 millones de dólares, 9%) según el Banco del República.
(Además: Turismo en Colombia marca inversión extranjera y entrada de divisas).
Medidas exitosas para atraer la confianza de los inversores extranjeros según el informe:
● Atraer inversionistas extranjeros requiere una actividad económica sólida, infraestructura modernizada y oportunidades claras en negocios estratégicos con alto valor agregado y costos competitivos.
● Disponer de un capital humano desarrollado que fomente el talento profesional a través de una alta cualificación, y además fomente un carácter proactivo que impulse la innovación.
● Desde el punto de vista político, se debe establecer una estrategia diplomática adecuada para desarrollar redes y conexiones con otras regiones, además, comunicar con transparencia las ventajas del país, reduciendo la asimetría de información entre inversores.
● Para mejorar la percepción de estabilidad regulatoria, se necesita un sistema tributario estable y un sistema burocrático ágil. La estabilidad económica y política es esencial para garantizar la estabilidad empresarial a largo plazo.
● Es crucial establecer una política de incentivos clara, que puede incluir: Incentivos fiscales, como reducciones o eliminaciones de impuestos, incentivos financieros, como subsidios directos para reducir los costos de inversión y operación.
“Estas son algunas de las medidas que una región o país puede implementar para atraer inversión extranjera. Sin embargo, hay situaciones globales que afectan generalmente a todas las regiones del mundo y cuyo impacto a veces no puede ser amortiguado por los distintos países”. afirma Yagüe, y concluye, “A pesar de los recientes conflictos geopolíticos y económicos que involucran a toda la sociedad mundial, muchos países han sabido reaccionar implementando muchas de las medidas mencionadas anteriormente”.
MALETÍN
