Kinshasa, 28 mar (EFE).- La situación humanitaria en la provincia de Ituri, en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), es “cada vez más crítica”, con más de 1,6 millones de personas desplazadas por los constantes ataques de diversas grupos rebeldes, advirtió hoy el Consejo Noruego para los Refugiados (NRC).
“No podemos darnos el lujo de ignorar el deterioro del conflicto en Ituri. (…) Necesitamos entregar más ayuda humanitaria y al mismo tiempo promover el diálogo y la reconciliación a nivel local”, afirmó el director de la NRC para la República Democrática del Congo, Eric Batonon, en un comunicado.
Esta ONG alertó de un alarmante aumento de los ataques en Ituri, con cerca de doscientos ataques en lo que va de año.
Los ataques, además de obligar a muchas personas a abandonar sus hogares, impiden a los agricultores cultivar sus tierras por miedo a ataques o represalias, perdiendo así sus métodos de subsistencia.
“Me siento como si estuviera en una prisión. No me gusta este lugar. Me gustaría volver a casa porque aquí es difícil conseguir comida y no hay mucha ayuda”, dijo a la NRC una mujer desplazada, Georgette, refugiada en uno de los campos. la región.
La NRC también advirtió sobre un preocupante aumento de las disputas por tierras, agravadas por los movimientos de población.
Además, “los niños suelen ir a la escuela con poca o ninguna comida para sustentarse y en aulas superpobladas y mal mantenidas, lo que repercute negativamente en los resultados del aprendizaje”, añadió la ONG, que considera la educación “un componente fundamental para construir a largo plazo”. soluciones pacíficas.
Batonon pidió a la comunidad internacional que ayude a “las comunidades a reconstruir su confianza y sus relaciones para evitar aún más conflictos en el futuro”.
Algunas partes de la provincia de Ituri han experimentado una grave escalada de ataques por parte de grupos armados en los últimos años, especialmente por parte de Codeco, que representa a la comunidad lendu y se formó como grupo armado en 2018 para luchar contra los abusos del ejército. congoleño.
Las peores masacres pueden haber sido actos de represalia contra la milicia del Frente de Autodefensa Popular de Ituri (FPAC-Zaire), que se describe a sí misma como un grupo de autodefensa para proteger a la comunidad hema contra los ataques de Codeco.
Las comunidades lendu (agricultores) y hema (pastores) han tenido una larga disputa que causó miles de muertes entre 1999 y 2003.
Ante esta ola de violencia, la asesora especial de Naciones Unidas para la prevención del genocidio, Alice Wairimu Nderitu, incluso advirtió a principios de 2023 del riesgo de que se produjera un genocidio.
Desde 1998, el este de la República Democrática del Congo está sumido en un conflicto alimentado por las milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la misión de la ONU en la República Democrática del Congo (Monusco). EFE
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