El intento de Donald Trump de explicar la Batalla de Gettysburg tomó algunos desvíos verbales extraños, y sus críticos se apresuraron a denunciarlo.
“Gettysburg, qué batalla tan increíble fue esa. La batalla de Gettysburg”, dijo el expresidente en un mitin en Pensilvania el sábado. “Qué increíble, quiero decir, fue tan interesante, tan cruel y horrible, y tan hermoso en tantas formas diferentes”.
Trump continuó:
“Gettysburg. Guau. Voy a Gettysburg, Pensilvania, para mirar y observar. Y la declaración de Robert E. Lee: “Quien ya no está a favor, ¿alguna vez te diste cuenta?” Ya no estoy a favor: “Nunca luchéis cuesta arriba, muchachos, nunca luchéis cuesta arriba”. Estaban luchando cuesta arriba. Él dijo: ‘Vaya, eso fue un gran error’. Perdió a su gran general y estaban peleando. ¡Nunca peleéis cuesta arriba, muchachos! Pero fue demasiado tarde.”
La divagación se volvió aún más surrealista cuando alguien justo encima del hombro izquierdo de Trump comenzó a hacer muecas extrañas a mitad de camino:
Trump ha sido propenso a cometer errores verbales, tropiezos y pifias, especialmente últimamente.
Pero incluso sus críticos quedaron perplejos ante su intento de describir una de las batallas más famosas de la historia estadounidense: