Este problema no discrimina ciudades, municipios, estratos o sectores, porque si bien se han hecho diferentes inversiones en el sector eléctrico del Caribe, e incluso las empresas que prestan el servicio han cambiado, nada parece haber cambiado. Facturas de energía de más de un millón de pesos mensuales son el pan de cada día de miles de usuarios de la Costa.
La transición energética y el proceso que actualmente lleva a cabo el Gobierno podrían proporcionar una luz de esperanza a los afectados por los precios de la energía, ya que no es ningún secreto que el potencial eólico y solar en estos sectores es alto.
“El gobierno nacional tiene todo este proceso, tiene empresas contratadas, como Afinia y Aire, que son las que de una u otra manera prestan el servicio, y tienen algunos beneficios en términos de tarifas, precisamente para que puedan lucrar, para que puedan hacerlo atractivo”, comentó.
En ese sentido, Tampoco existen los subsidios que tenían estas empresas hace unos años, por lo que las propias empresas deben luchar para aumentar los ingresos; Esta tarea se realiza a través de tarifas, lo que afecta y genera un perjuicio directo al usuario.
“Lo que tenemos en este momento son tarifas que están fuera de competencia, incluso a nivel nacional, tenemos las tarifas más altas de todo el país, en nuestros hogares, en nuestros negocios, en nuestras industrias, y así vamos para lograr un desarrollo equitativo y equilibrado”, añadió.
¿Cuál es el déficit tarifario que enfrenta actualmente el sector?
Verano también se refirió al compromiso que marcó el presidente Gustavo Petro, en el que abogó por un tratamiento más equitativo de las tarifas. Además, hizo referencia a la opción tarifaria que se generó en la pandemia. Esta opción tarifaria se produjo cuando se congelaron los aumentos tarifarios, lo que a su vez produjo una deuda con las empresas energéticas, las cuales continuaron brindando el servicio, sin recibir el mismo dinero. Esta deuda superaría los 7 mil millones de pesos.
“Yo era gerente de una empresa de electrificación y mi función principal era reducir pérdidas, tenía que salir a tratar de reducir pérdidas técnicas y también pérdidas por robo, o sea el 97% de mi tiempo, con todo mi tiempo, se dedicó a esa función. Ahora no, ahora simplemente se les dio el poder para que las pérdidas se las carguen directamente al usuario”, agregó Verano.
Es decir, en el momento más crítico, Verano asegura que nadie está luchando por bajar las pérdidas y son los usuarios quienes están maniobrando esas pérdidas. Tras resaltar este problema, Petro decidió que el Gobierno asuma el pago de los estratos 1,2 y 3.
“Las pérdidas deben ser una tarea importante para cualquiera que asuma la gestión de una empresa de energía eléctrica”, concluyó.