Después de la amnistía – .

Una vez aprobada la ley de amnistía con el ruido ensordecedor que era de esperar en el Congreso –principal traspaso de Pedro Sánchez a Junts y ERC a cambio de que sus votos fueran juramentados–, la legislatura entra en una nueva fase tras la … una cierta parálisis que se arrastra desde su inicio debido al maratón electoral del año pasado, que se completará con las elecciones europeas del próximo domingo. Su rumbo estará determinado, sobre todo, por el incierto desenlace de la gobernanza en Cataluña. El Ejecutivo de coalición necesita de todos los socios con los que ha articulado su precaria mayoría parlamentaria para aprobar cualquier proyecto, por lo que la hipotética retirada de algún aliado independentista que salga mal de los pactos por el control de la Generalitat comprometería mucho su estabilidad. El presidente corre el riesgo de que, una vez satisfecha una exigencia de tal peso político como la de borrar los crímenes del ‘procés’, los secesionistas -inmersos en una feroz competencia, y Esquerra, además, en una aguda crisis interna tras su reciente debacle- en las urnas-, siéntanse libres de apoyarlo por más tiempo en Moncloa o vincular su apoyo a una demanda tan inconstitucional como un referéndum de autodeterminación. El hasta ahora bloque de granito de la investidura comienza a mostrar grietas que se extienden incluso a los ministros de Sumar. El fracaso de la ley contra el proxenetismo y la retirada de la ley por falta de apoyo al distanciarse varios de sus socios han colocado al PSOE ante un espejo inquietante. En poco tiempo se confirmará si tales movimientos responden sólo a la lógica de la batalla del 9J, que daría oxígeno al Gobierno, o a un reposicionamiento de estos partidos ante un posible avance electoral en el corto plazo si Sánchez Sale reforzado de las elecciones europeas tras el espaldarazo que recibió en las autonómicas catalanas o por un eventual desmarque de los independentistas. Con los Presupuestos de este año prorrogados, la tramitación de los Presupuestos de 2025 ofrecerá pistas sobre el camino de la legislatura. La incertidumbre que rodea el panorama político se ha visto agravada por un factor imprevisto: la investigación judicial de Begoña Gómez, esposa del presidente, por presunto tráfico de influencias y corrupción en los negocios. El desarrollo del caso, incluido su eventual archivo, condicionará también el futuro del Ejecutivo en un mandato caracterizado por la excepcionalidad.