A través del Ipaat se presentará en la provincia un proyecto de investigación y producción de este tipo de combustible, destinado al transporte aéreo, fluvial y marítimo.
La Liga de Provincias de Bioenergía, integrada por las jurisdicciones productoras, entre ellas Tucumán, acordó conformar una red regional para la investigación y producción de biocombustibles sustentables para el transporte aéreo, fluvial y marítimo.
A través de un acuerdo de cooperación, las provincias del NOA y el centro del país impulsarán políticas públicas y proyectos privados, dentro de una estrategia dirigida a la producción, comercialización y consumo de este tipo de combustible e insumos asociados para su uso en aviones y barcos. , como contribución a la mitigación del cambio climático mediante la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Por Tucumán, se sumó a este convenio el Instituto de Promoción del Azúcar y del Alcohol (Ipaat), entidad autónoma integrada por representantes del Estado provincial y del sector privado de la agroindustria azucarera. Lo hizo en el marco de la IV Cumbre Mundial de Economía Circular, encuentro organizado el pasado viernes por la Municipalidad de Córdoba y el Ente BioCórdoba.
“Durante mucho tiempo la provincia utilizó el lema ‘Tucumán es azúcar’, pero con el avance de la transición energética hemos visto un cambio significativo. Ahora hablamos de ‘Tucumán es Energía’. Esta industria bicentenaria ha sabido adaptarse a los cambios actuales y hoy trabaja por el cuidado del medio ambiente”, explicó en su presentación. Jorge Etchandigerente del Ipaat, en la capital cordobesa.
Esta no es una iniciativa sin precedentes. Córdoba ha avanzado en los últimos años en una política bioenergética, no sólo con un régimen para el uso de biocombustibles en el transporte de carga, en el transporte público de pasajeros y flotas oficiales, y en la instalación de plantas de transformación de biomasa. en bioetanol, biodiesel o biometano. También se centró en comenzar a producir y probar su biocombustible para aviones. Para ello, ha iniciado la instalación de un banco de pruebas con diferentes motores, con el objetivo de alcanzar estándares de calidad y octanaje del combustible.
Jorge Etchandy, del Ipaat, en Córdoba.
Los pasos
En Tucumán se espera sobreproducción para la zafra 2024, con altos volúmenes de materia prima y azúcar. Este escenario se presentará frente a las estrategias actuales: la exportación y producción de alcohol para bioetanol, así como para la industria farmacéutica y de licores. Con ello se buscará evitar un exceso de oferta en el mercado interno y, como consecuencia, una caída mayor en el valor del saco de 50 kilogramos.
“Necesitamos alcoholizar más azúcar”, enfatizó el directivo del Ipaat, al respaldar el proyecto de producción de bioetanol para aviones y barcos. “Puede ser una tercera pata para el alcohol”, añadió.
¿Cómo se aplicará en Tucumán? El convenio establece, según se conoció, capacitaciones a diferentes escalas en la provincia a cargo del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA). El objetivo aquí es acercar conocimientos a legisladores, funcionarios de la Casa de Gobierno y otros sectores para diseñar las regulaciones locales o nacionales necesarias, con el fin de fomentar las inversiones.
En un siguiente paso se contempla la transferencia de tecnología a partir de la experiencia de Córdoba y también del IICA para producir biocombustible para aviones y barcos en Tucumán: la instalación de un parque industrial y la búsqueda de estándares de calidad, entre otras operaciones.
“Se puede abrir una puerta con una demanda infinita, con un mercado de precios internacional muy competitivo. Hay una demanda que supera cinco veces la oferta en el mundo”, explicó Etchandy, quien destacó la creación de un cluster tecnológico de productores de biocombustibles entre las provincias.
Desafíos
Los ingenios tucumanos producen alrededor de 310 millones de litros de alcohol hidratado. De ese total, el 65% se destina a bioetanol. Principalmente producen 1,2 millones de toneladas de azúcar físico.
En la provincia funcionan 10 destilerías, de las cuales siete están dentro del programa de bioetanol.
El proyecto de red regional para la producción de biocombustibles sustentables para el transporte aéreo, fluvial y marítimo se presentará en Tucumán en medio de un mercado marcado por una zafra con pronósticos récord, limitaciones de cuotas y precios para el bioetanol de caña de azúcar (que proporcionó el gobierno nacional) y comercio exterior sin variaciones. En el sector reconocieron que el desafío será darle forma a la iniciativa e incentivar a los industriales a realizar nuevas inversiones, así como generar marcos regulatorios confiables.
