La alimentación del bebé es una de las principales fuentes de estrés para las madres

La llegada de un bebé es un acontecimiento lleno de alegrías y expectativas, pero también de innumerables desafíos y presiones, especialmente para las madres. Según un reciente estudio realizado por una consultora, la alimentación del bebé se convirtió en una de las principales fuentes de estrés y ansiedad para las madres, impactando directamente en su salud mental.

La encuesta nacional fue realizada por Trendsity y reveló que la presión social sobre las madres que trabajan y son madres solas es significativa. Estas mujeres enfrentan constantes juicios de valor y estigmas relacionados con los “deberes” maternos.

Instrucciones sobre cuándo y cómo alimentar al bebé, acostarlo, controlar visitas, sonidos, salidas y exposición al sol, cómo vestirlo y cambiarlo, son sólo algunas de las directivas externas que las madres deben manejar. Este bombardeo constante de expectativas se suma a una montaña rusa emocional que incluye felicidad, ansiedad, miedo, excitación, presión, exigencia e inseguridad.

El 55% de las madres considera que dar el biberón descomprime su agenda


Al respecto, El Litoral consultó a Marisa Russomando, licenciada en psicología (MN 23.189), quien explicó que opiniones diferentes y contradictorias sobre la crianza de los hijos pueden generar una gran inseguridad en las madres, especialmente en aquellas que acaban de tener su primer hijo. “Una nueva madre siempre quiere hacer lo mejor para su bebé. Cuando eso se pone en duda, cuando recibe opiniones diferentes y a veces contradictorias, se genera inseguridad en su responsabilidad respecto de las decisiones que está tomando respecto de la crianza de su bebé. La alimentación es una de las primeras decisiones a tomar”, afirmó el profesional.

La psicóloga destacó la importancia de prestar atención a cualquier signo de ansiedad o angustia en las madres primerizas, quienes pueden estar atravesando un período de mayor sensibilidad debido al posparto. “Si la lactancia materna genera mayor malestar o rechazo, es fundamental buscar apoyo profesional, ya sea de un neonatólogo, pediatra, puericultor o psicólogo especializado en maternidad. El objetivo es entender lo que está pasando y brindar el apoyo necesario para que la madre pueda tomar decisiones libres de presión social”, dijo.

Russomando también destacó la importancia de no estar sola y evaluar quién puede ser una buena compañía para la nueva mamá. “Es importante que alguien pueda acompañarla en su camino, no que venga a imponer el suyo o que alimente el cuestionamiento. Estar acompañada, evaluar bien quién la puede acompañar de buena manera y tener acceso a profesionales de la salud, grupos de apoyo y otras madres que estén pasando por situaciones similares es fundamental”, explicó.

El informe reveló que el 71% de las madres se sienten angustiadas por la lactancia materna


El estrés relacionado con la alimentación del bebé está íntimamente ligado a la inseguridad que generan las decisiones que se toman. La psicóloga aconsejó que “las madres deben tener presente las palabras de los profesionales de la salud que están siguiendo al bebé y no dejarse llevar por comentarios inexactos. La autoestima materna juega un papel crucial en este contexto, ya que una madre que confía en sus decisiones es una madre más tranquila y, por tanto, más capaz de brindar el amor y el cuidado que su bebé necesita”, afirmó.

Lo que muestra el estudio

El estudio Trendsity destaca las dificultades y presiones que enfrentan las madres que no pueden o eligen no amamantar, así como las trabajadoras que deben equilibrar sus responsabilidades laborales con la lactancia materna. Estas madres suelen sentirse juzgadas y cuestionadas, lo que aumenta su estrés y afecta su salud mental.

La investigación destacó que el 55% de las madres considera que dar el biberón descomprime su agenda y les permite descansar por las noches, mejorando su salud mental. Este porcentaje aumenta al 72% entre quienes complementan la leche materna con fórmula y alcanza el 77% entre quienes utilizan la fórmula como dieta principal. La flexibilidad en la alimentación del bebé no sólo ayuda a las madres a descansar más, sino que también reduce su nivel de estrés, permitiéndoles disfrutar más de la maternidad.

Ver tambiénSíndrome del espejo retrovisor: cómo superar la obsesión por el pasado y vivir el presente

Los padres también juegan un papel importante en este contexto. Según el estudio, el 87% de los padres cree que su papel principal en los primeros meses de vida del bebé es apoyar emocionalmente a la madre. Además, al 69% de los padres les gustaría ayudar más para que su pareja no se sienta tan presionada a la hora de alimentar al bebé. En las familias que suplementaban la leche materna con fórmula, el 85% de los padres percibió que disminuía la presión sobre su pareja.

El informe reveló que el 71% de las madres se sienten angustiadas por la lactancia materna debido a mandatos sociales que promueven una imagen de “maternidad perfecta” y no permiten desviaciones del molde estandarizado. Esta falta de libertad amenaza el bienestar integral de las mujeres y sus familias.

 
For Latest Updates Follow us on Google News
 

PREV ¿Qué está pasando con una categoría clave de la ganadería argentina? – .
NEXT ¿De qué se trata el bombeo anunciado por el Gobierno? – .