El fin de semana en Logroño ha dejado, entre otras imágenes, un contenedor flotando en el Ebro -uno de los que se han desplegado en el centro histórico de la ciudad- y sacado del río por efectivos del parque de bomberos. Para esto … En el caso, que está siendo investigado, aún no ha habido sanciones, pero sí cuatro personas multadas por daños a bienes de servicio público. Este capítulo incluye los daños a las obras Concéntricas que se desplegaron este fin de semana en diferentes zonas de la ciudad. ¿Cuánto cuesta? 210 euros una broma.
En total, entre los días (y noches) del 26 y 27 de abril, la Policía Local ha dictado 60 multas por actuar contra las ordenanzas municipales de la ciudad. La mayoría de ellos –42– fueron otorgados a personas que orinaron en la calle y, en un caso más, incluso se sancionó a alguien por defecar. En todos estos casos, las sanciones alcanzan los 301 euros.
Por vociferar, cinco personas más tuvieron que pagar 100 euros, lo mismo que otras cinco personas sancionadas dentro de ese capítulo que se denomina ‘otros motivos’. En tres casos más se trató el ruido en viviendas, con sanciones de 100 euros, así como casos relacionados con drogas y que serán tratados por la Delegación del Gobierno.
Orinar en plena vía pública conlleva una sanción de 301 euros, mientras que gritar supone pagar 100 euros.
Las sesenta sanciones por actuaciones contrarias a la normativa local fueron aún mayores el fin de semana anterior, cuando se alcanzaron 88, la mayoría también por orinar en la calle.
Estas cifras han sido una constante en los últimos tiempos, junto con las quejas de los vecinos del centro histórico, quienes tienen que soportar un bullicioso y sucio ambiente nocturno que les impide descansar, aunque algunas de estas situaciones también se dan en otras zonas de la ciudad. la ciudad.
Desde principios de año, las sanciones por conductas contrarias a ordenanzas que fomentan la convivencia, la limpieza y los animales han superado las 550.
Hasta el 17 de abril, eran 407 y, de ellos, de los 227 relacionados con la limpieza, hasta 212 fueron por orinar en público, cuando todo el año 2023 acabó con 60 expedientes de este tipo, según el informe de la Policía Local. Un fin de semana de hoy equivale prácticamente a todo el año pasado en esta materia.
Ni siquiera la fachada norte de La Redonda ha escapado a convertirse en los últimos meses en un urinario público. En los últimos días se han desplazado los contenedores que se encontraban junto al muro de este edificio, que, por cierto, cuenta con la máxima protección en la normativa urbanística municipal, para intentar ahuyentar a quienes se acerquen a él para orinar. Queda por ver el éxito de esta medida, en la que también insisten los vecinos de los alrededores.
También hasta mediados de abril, en lo que a conductas descorteses se refiere, en 35 ocasiones las sanciones tuvieron que ver con despedidas de soltero.
Hasta en 23 casos fue por conductas como gritar en la calle, aunque diez sanciones estuvieron incluso relacionadas con situaciones que perturbaban gravemente la convivencia ciudadana, la mitad, en tres meses y medio, de las que se produjeron a lo largo del año pasado, que fueron 19. Este año incluso se produjo una intervención en un apartamento turístico, en pleno centro de la capital, por un caso de turistas que intentaban tirar muebles por una ventana.
En estos primeros tres meses y medio del año el ruido en las viviendas ha supuesto 76 multas.
