Puedes visitar la exposición “Domingo Gatti y Ariel Gatti” en Kiosco Galería de Arte, Mitre 37, 1er. piso a partir de este miércoles. A las 19.30 horas quedará habilitado con presencia de los plásticos. Una oportunidad para encontrar la obra de padre e hijo, artistas que despliegan su talento en el arte figurativo y la experimentación abstracta. El año pasado, Domingo Gatti recibió el reconocimiento al mérito artístico de la Provincia por su gran trayectoria en las artes plásticas salteñas. Conocido como un gran dibujante, incursionó posteriormente en la pintura acrílica y al óleo, aportando color a sus temas más emblemáticos: Salta y su gente.
Ariel experimenta con lo abstracto y con otras dimensiones del arte pictórico. Juntos hablaron con El Tribuno.
¿Cuándo empezaste a pintar, Domingo?
Mis inicios fueron cuando era muy joven. Siempre lo cuento, y es parte de mi anécdota, cuando tenía 5 años gané un concurso en el colegio Alberdi, y fue entonces cuando me di cuenta que me gustaba dibujar. Entonces de ahí me llevaban a todas las fiestas patrias que había en el colegio, para hacer los dibujos en el pizarrón. Debió ser en el año 51, 52 aquel.
¿Y cuándo llegaron los estudios?
También gané un concurso en la escuela. Recuerdo que en aquella época se potenciaba mucho la parte artística, al menos yo he tenido esa suerte. Ganó el concurso y el primer premio fue una beca para Cebas -Centro de Estímulo de Bellas Artes-, aquí en Salta. Y bueno, fui a la escuelita que estaba en Balcarce 200, y allí conocí a algunos profesores como Guillermo Petrón y Antonio Yutronich, (Roberto) Maheasi, Neri Cambronero. Y cuando terminé el curso me animaron a ir a la Escuela de Bellas Artes Tomás Cabrera, en la calle Zuviría. Y pasé momentos maravillosos allí, de verdad. Creo que ha sido la época dorada de la pintura en Salta, tuve como maestros a Luis Preti, (Jorge) Román, Osvaldo Juane, (Rodolfo) Argenti… fueron grandes maestros, y tuve la suerte de tenerlos.
¿Qué te atrajo más, el dibujo o la pintura?
Lo que más me atrajo fue el dibujo. El Maestro Preti incluso me dijo: “Tú, mono, tienes dinero de artista. Coge la tinta y haz tinta”. Entonces comencé a hacer tinta y me gustó tanto que tengo muchas muestras de tinta. Quizás soy más conocido por la tinta que por el color.
Recibió mérito artístico el año pasado…
Sí quiero agradecer a la Provincia, al gobernador por haberme otorgado la mención honorífica, digamos, de los artistas de Salta, que es mérito artístico… Es muy emotivo…
¿Qué significa para usted esta exposición?
Es muy especial. Especial porque es una retrospectiva mía, y especial también porque mi hijo dará un paso más en la pintura. Y eso me hace muy feliz; En este momento de mi vida, me da esta satisfacción. Hacer algo con mi hijo era algo que soñaba, quieres que ese sello quede, la huella -digamos así- en su vida también…
Ariel, ¿cómo vives la exposición?
Es una exposición única, no es común que padre e hijo expongan con dos técnicas totalmente diferentes. Hace acrílicos, que es más común. Y mi serie se llama “Universo Evolutivo”. Universo porque hago mucha alusión a lo que son los universos en mis cuadros, y evolutivo porque es una evolución de un estudio de varios años, buscando una técnica nueva que no sea la acuarela, el óleo, la tinta, las de siempre. Soy empedernido en buscar nuevas tecnologías en todo, y como esto me gusta mucho, pasé por muchas técnicas y terminé con algo que me gusta mucho. Son pinturas elastoméricas especiales, con disolventes, pintadas sobre vidrio y fundidas al fuego. Es una técnica bastante especial. Y sería bueno que la gente viniera a verlo porque es algo muy nuevo.
La técnica de tu padre…
Ariel: Mi viejo ha pasado por lo que han pasado todos los artistas, empezamos con lápiz negro en el colegio, luego le pusimos colores y luego empezamos con acuarela, pasamos al carboncillo, también experimentamos con el óleo… Y yo pasé por todo. esas técnicas y él también. Y cada uno se decide por aquello con lo que se siente cómodo. La técnica por la que se dio a conocer es con tinta china, y ahora, lo último que hizo y esta última exposición, son todos acrílicos y figurativos. Y el mío es totalmente abstracto. Es paisajista y, más que nada, es un luchador por el patrimonio aquí, en Salta. Tiene todos los edificios más importantes de la ciudad en sus pinturas. Ese es su trabajo…
Toda una era…
ariel: En su carrera artística, la mayor parte de su tiempo la dedicó a inmortalizar los edificios emblemáticos de Salta. Ese fue su mayor esfuerzo, intentar que la gente los viera de otra manera. Hubo una exposición con edificios antiguos, con fotos antiguas que gustaron mucho a los salteños…
Domingo: Eso tuvo un gran impacto en la gente, se trataba de fotografías de 1900, 1920…
ariel: Eran fotografías en blanco y negro y convirtió las mismas fotografías a color. A la gente le impactó muy bien ver esas fotos que todos conocemos, pero nunca las vimos en color, ni siquiera en la televisión porque no había televisión a color, y él mostró esas imágenes en color, y eso fue muy bien recibido. . muestra.
¿Qué sientes por Salta, Domingo?
Un cariño muy especial. Nací en Agua Negra, un pequeño pueblo ubicado en la Cuesta del Obispo, así que más gaucho… imposible. Mis padres, mis padres, eran trabajadores que hacían la ruta a Cachi. Mi viejo era un italiano que era herrero, y trabajaba en el taller, y yo nací allí, accidentalmente pero ya nací allí. Viví allí poco tiempo y ya me trajeron a la ciudad. Entonces soy salteño, por eso los paisajes y la gente…
ariel: Y las nubes… Papá era piloto, entonces verás que todos sus cuadros tienen cielos muy elaborados, muy elaborados y muy estudiados porque él vivía volando. Entonces, las nubes, los cielos, los azules, son muy típicos de sus pinturas y los verás en la exposición.
Que bonito ver Salta desde las alturas…
Domingo: Sí. Es hermoso y he tenido esa alegría…
La alegría de haber visto Saltar desde las nubes.
En otro tramo de la charla, Domingo Gatti recordó su paso por la aviación.
“Son pocos los que pueden hacer eso, papá tiene la dicha de haber visto las cosas desde arriba”, dijo al respecto Ariel Gatti, y Domingo agregó: “Y la aviación era mi otra pasión, volar. Y también me hice piloto. de la Provincia y director general de Aviación de la Provincia, y allí me jubilé.
El hablar pausado y reflexivo de Domingo Gatti refleja también la Salta de otros tiempos que este artista, nacido el 1 de mayo de 1946, intentó mostrar con su obra.
En noviembre de 2014, Domingo reunió acrílicos en el salón de la Casa de la Cultura bajo el nombre “Testimonios de Salta”.
“Domingo Gatti, de tanto buscar su propio lenguaje plástico, ya lo encontró”, expresó en su momento César Alurralde. “Sus obras puramente figurativas revelan representaciones concretas. Intenta y logra rescatar, con fidelidad y amor, lo poco que queda de Salta de antes. Tiene a su favor su imaginación y dominio absoluto de los medios, con tecnicismo y mejor pulso, además de un profundo conocimiento de lo que crea con devoción y cariño”, afirmó el escritor y poeta.
Óleos y acrílicos inspirados en fotografías antiguas formaron parte de la exposición de abril de 2018, en el mismo escenario, “El color de la Salta de ayer”.
“Era un placer que me quería dar, que requirió un año y medio de trabajo, pero valió la pena, porque me sorprendió gratamente ver que a la gente le gustó, tanto adultos que recordaban los rincones de Salta antiguos como así como jóvenes que tienen referentes de sus abuelos y padres”, destacó en su momento el pintor salteño.
Domingo Gatti obtuvo numerosas distinciones por su labor artística, siempre radicada en su Salta natal.
