La Biblioteca Nacional de Francia pone en cuarentena libros decorados con arsénico – .

La Biblioteca Nacional de Francia pone en cuarentena libros decorados con arsénico – .
La Biblioteca Nacional de Francia pone en cuarentena libros decorados con arsénico – .

La BnF pone en cuarentena con arsénico libros del siglo XIX

El Biblioteca Nacional de Francia (BnF) informó que puso en cuarentena Cuatro libros del siglo XIX decorados con arsénico., para evitar cualquier riesgo por este producto tóxico. La alerta surgió a finales de la década de 2010, cuando un grupo de académicos descubrió este elemento químico en las portadas de libros de esa época.

Un programa de investigación germano-estadounidense llamado Proyecto de libro de veneno (Proyecto de libros envenenados) es responsable de identificar los libros afectados. La gran mayoría de los libros conocidos hasta ahora se encuentran en Estados Unidos. El BnF Comparó los títulos ya identificados en otros países con su propio catálogo. Y tras realizar los análisis correspondientes, constató que sólo cuatro volúmenes, de los 28 potencialmente afectados, contenían arsénico.

“Estos libros han sido puestos en cuarentena y serán sometidos a análisis adicionales por parte de un laboratorio externo para evaluar la cantidad de arsénico presente en cada volumen”, indicó la institución. Los cuatro fueron impresos en Gran Bretaña y rara vez se consultan. Se trata de dos volúmenes de baladas irlandesas recopiladas por Eduardo Hayes en 1855, una antología bilingüe de poesía rumana de Henry Stanley publicado en 1856 y un compendio de obras del Real Sociedad Hortícola Británica durante los años 1862 y 1863.

Sólo cuatro libros de la BnF contienen arsénico tras su análisis

El arsénico era apreciado en aquella época por el tono llamado “verde Schweinfurt” o “verde París” que daba a las portadas, y se utilizó entre los años 1790 y 1880, según los datos más actuales. Este pigmento se utilizó principalmente en los países de habla inglesa y en Alemania, y más raramente en Francia.

El BnF indicó que está investigando otros libros con tapas verdes “más allá de la lista de los Proyecto de libros envenenados”. En teoría, los lectores que consultan este tipo de obras corren el riesgo de sufrir molestias o vómitos. La biblioteca precisó que el riesgo para los usuarios era, a priori, muy moderado.

De hecho, en los últimos años no se han registrado casos sospechosos de intoxicación en ningún lugar del mundo. Las bibliotecas públicas alemanas han iniciado desde marzo una extensa investigación para encontrar los libros afectados y se realizarán decenas de miles de análisis. Los resultados aún no se conocen.

Fuente: AFP.

[Fotos: EFE/Gonzalo Fuentes/ Archivo]

 
For Latest Updates Follow us on Google News
 

NEXT El libro que Liliana Bodoc había publicado antes de morir y ni sus hijos lo sabían