Escuche este artículo
https://w.soundcloud.com/player/?url=https%3A%2F%2Fapi.soundcloud.com%2Ftracks%2F1805489151%3Fsecret_token%3Ds-eDYHVgomXkW
El 23 de abril se celebra el Día Internacional del Libro porque la UNESCO eligió esa fecha como referencia por las muertes de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega en 1616. Sin embargo, Cervantes había muerto el día 22, pero su muerte se registró al día siguiente, mientras que Shakespeare murió el 23 de abril pero según el calendario juliano, que todavía se usaba en Inglaterra. Su equivalente en gregoriano sería el 3 de mayo. En cualquier caso, la Conferencia General de la UNESCO estableció el Día Internacional del Libro o Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor en 1995. Sus propósitos son fomentar la lectura y la industria editorial, y promover el derecho a la propiedad intelectual. propiedad.
Para la UNESCO, los libros son la herramienta más poderosa para difundir conocimientos y contribuir al enriquecimiento cultural. Sin embargo, los hábitos de lectura varían según la edad o el origen. A nivel mundial, las poblaciones de India, Tailandia y China pasaron la mayor parte del tiempo leyendo en 2021, según datos recopilados por Global English Editing. En términos de alfabetización, Europa y Asia Central tienen la tasa más alta (99%), seguidas de Asia-Pacífico (95%) y América Latina y el Caribe (93%). Le siguen Oriente Medio y África del Norte (81%), Asia del Sur (67%) y África subsahariana con 61%), según la recopilación Our World in Data.
España, el origen del Día Internacional del Libro
La idea de una fiesta anual del libro se remonta a 1923, cuando el escritor y editor valenciano Vicente Clavel Andrés la propuso a la Cámara Oficial del Libro de Barcelona para promocionar la cultura española. Aunque su petición inicial fracasó, el rey Alfonso XIII aprobó la real cédula tres años después. De esta forma, el 7 de octubre se fijó como la Fiesta del Libro en honor al natalicio de Cervantes.
Sin embargo, pronto hubo desacuerdos sobre la fecha. Algunas personas vieron más lógico honrar al escritor el día de su muerte, ya que era más preciso que el día de su nacimiento. Además, la primavera parecía más apropiada para celebrar eventos al aire libre. Así, la Fiesta del Libro se trasladó en 1930 al 23 de abril, coincidiendo con la celebración de Sant Jordi. En Cataluña la tradición consistía en regalar libros a los hombres y rosas rojas a las mujeres. La UNESCO no se fundaría hasta 1945.
El Día del Libro se expandió en las décadas siguientes gracias a la Unión Internacional de Editores. Así, con el apoyo de otros países, España presentó en 1995 la propuesta del organismo para oficializarlo. La UNESCO, que la impulsaba desde 1988, aprobó la iniciativa de dar más peso al fomento de la lectura. También creó la “capital mundial del libro”, título anual que otorga junto con organizaciones internacionales de editores, libreros y bibliotecas. La ciudad elegida promueve la cultura de la lectura y difunde sus valores entre la población nacional e internacional a través de talleres de escritura, encuentros entre lectores y autores o exposiciones. La primera ciudad fue Madrid en 2001, y en 2024 será Estrasburgo.
Otras fechas, otras tradiciones
Aunque la UNESCO estableció una fecha global, algunos países han seguido sus propias tradiciones. En América Latina, Uruguay celebra desde 1940 su Día Nacional del Libro cada 26 de mayo, fecha en la que se fundó la primera biblioteca pública del país en 1816. Paraguay lo hace el 25 de junio en honor a la que luego fue considerada la primera obra histórica patriótica, por el historiador colonial Ruy Díaz de Guzmán. Por su parte, Reino Unido e Irlanda celebran el Día Mundial del Libro el primer jueves de marzo. La organización benéfica del mismo nombre, impulsora de la iniciativa, eligió el día para que no coincidiera con las vacaciones de Semana Santa. Así, desde 1998, cada niño recibe un cupón que puede canjear por un libro a lo largo del día.
