Un francés que estaba detenido en Irán desde septiembre de 2022 y al que las autoridades francesas consideraban un “rehén” del régimen de Teherán, llegó este jueves al aeropuerto de Le Bourget, en París.
El Ministro de Asuntos Exteriores, Stéphane Séjourné, fue uno de los que saludaron a Louis Arnaud en la pista de Le Bourget, al igual que varios miembros de su familia, poco después de que su avión aterrizara a las ocho de la mañana, hora local.
El presidente, Emmanuel Macron, había asumido el cargo unas horas antes de anunciar la liberación de Arnaud en su cuenta X, en la que destacaba que su regreso a Francia se produce “tras un encarcelamiento excesivamente largo en Irán”.
Macron no explicó los detalles de las condiciones de esa liberación, pero sí ofreció algunas pistas al agradecer a “nuestros amigos en Omán y a todos aquellos que han trabajado por este feliz resultado”.
El jefe de Estado aprovechó también la ocasión para recordar la situación de los otros tres franceses que, según París, están injustamente encarcelados en Irán, en represalia por la postura de París sobre el régimen de Teherán.
Se trata de Cécile Kohler y Jacques Paris, detenidos en mayo de 2022, y un tercer francés cuyo único nombre, Olivier, se ha filtrado.
En el caso de Louis Arnaud, su familia ha dicho que cuando fue detenido estaba de gira por Irán porque era un país que siempre había querido visitar por la riqueza de su patrimonio y el carácter de su población.
Las autoridades iraníes le reprocharon haber participado presuntamente en manifestaciones contra el poder tras el asesinato de la joven Masha Amini a manos de la policía.
Amini, de origen kurdo, había sido arrestada en septiembre de 2022 en Teherán por la Policía de la Moral por llevar incorrectamente el velo islámico. EFE y Aurora
