Philip Chism, un adolescente, fue condenado a al menos 40 años de prisión por asesinar, violar y realizar un robo contra su profesora de matemáticas de secundaria en Estados Unidos.
El 22 de octubre de 2013, un estudiante de noveno grado de la escuela secundaria Danvers en Massachusetts llamado Philip Chism hizo lo impensable. Con sólo 14 años, violó y mató a puñaladas a su profesora de matemáticas, Colleen Ritzer, de 24 años, con 16 puñaladas dentro de un baño de la institución.
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Se sabía que la alegre Ritzer hacía todo lo posible para ayudar a sus alumnos con matemáticas y le había pedido a Chism, de 17 años, que se quedara después de la escuela ese fatídico día de octubre. No sabía nada del complot que Chism había puesto en marcha días antes.
Al final del día escolar, Chism siguió a Ritzer al baño de la escuela. Blandiendo un cúter, Chism la robó, la violó y la mató, luego arrojó su cuerpo en un bote de basura hacia el bosque detrás de la escuela. Luego, Chism fue a la ciudad y compró una entrada al cine con la tarjeta de crédito de Ritzer.
Cuando la policía lo atrapó a la mañana siguiente, Chism no se había lavado las manos y todavía tenía la sangre de Ritzer en ellas. Philip Chism fue acusado del asesinato, violación agravada y robo a mano armada de Colleen Ritzer.
Fue juzgado como adulto y el 26 de febrero de 2016 fue condenado a cumplir al menos 40 años de prisión. El joven permaneció de pie, esposado y con el rostro inexpresivo, mientras el juez del Tribunal Superior David Lowy leía la sentencia en voz alta, tras las emotivas declaraciones de amigos y familiares de la profesora asesinada, Colleen Ritzer.
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“Él es pura maldad y la maldad nunca podrá ser rehabilitada”. dijo Peggie Ritzer, la madre de Colleen, furiosa porque Chism finalmente sería elegible para libertad condicional. “Nunca vamos a tener una segunda oportunidad y él tampoco debería hacerlo”.
Chism tenía 14 años cuando Ritzer fue asesinado y arrestado. Tendrá 54 años cuando tenga su primera oportunidad de ser elegible para la libertad condicional.
Durante el juicio, el abogado defensor de Chism argumentó que su cliente padecía un trastorno psicótico desde que era niño y que en el momento del asesinato de Ritzer respondía a voces y alucinaciones.
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La defensa admitió que Chism mató a Ritzer, pero planteó el argumento de la locura. El tribunal había determinado previamente que Chism podía ser juzgado.
La fiscal Kate MacDougall argumentó que Chism no padecía ninguna enfermedad mental. Las imágenes de las cámaras de vigilancia del interior de la escuela, incluidas imágenes de Chism siguiendo a Ritz hasta el baño donde fue asesinada, fueron parte del argumento de la fiscalía.
Con resumen de agencia.
