Cientos de miles de personas llenaron el centro de la ciudad de Sao Paulo el domingo (02/06/2024) para celebrar la marcha del orgullo LGBTQ+, que en 2024 invitó a “recuperar” los colores verde y amarillo de la bandera brasileña, tomados como emblema de la derecha política.
Una bandera arcoíris gigante cubrió la fachada del prestigioso Museo de Arte de Sao Paulo (MASP) en medio de una multitud Avenida Paulistael principal en esta gran ciudad del sureste de Brasil, donde reinó un ambiente festivo con música y mensajes a favor del respeto a “toda forma de amar, cada forma de ser”.
Bajo el lema “Basta de negligencia y regresión en el Legislativo”, los grupos organizadores de la tradicional manifestación convocaron a votar por candidatos alineados con los derechos LGBTQ+ en las elecciones municipales que se celebrarán en octubre de 2024 en Brasil. Además, permanecer atentos al avance de iniciativas conservadoras.
La marcha se produce pocos días después de que el Congreso brasileño prohibiera, con votos de extrema derecha y evangélicos, promover o financiar con dinero público acciones contra “el concepto de familia tradicional”, el aborto o las cirugías de cambio de sexo para adolescentes. La disposición, incluida en una ley de presupuesto, había sido vetada por el presidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.
Participar en la marcha del orgullo “es luchar por la visibilidad, contra la violencia y decir que existimos y somos ciudadanos con todos los derechos y deberes”, dijo a la agencia. AFP Eugenio dos Santos, asistente vestido con la camiseta del equipo auriverde.
Casi 20 millones de brasileños (10% de la población) se identifican como parte de la comunidad LGBTQ+, según la Asociación Brasileña de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Travestis y Transexuales e Intersex.
La primera marcha del orgullo en Brasil se realizó en 1997 y reunió a unas 2.000 personas. Ahora se considera uno de los más grandes del mundo, con una asistencia esperada de tres millones. La cita “es crucial para que el país entienda que esta lucha pertenece a toda la sociedad”, dijo al AFP el drag queen Tchakauna de las musas de la celebración, ataviada con un vestido de tul verde y amarillo.
La petición de vestir esos colores fue una proclama contra el expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022) y sus agrupaciones partidistas, quienes los utilizaron como símbolo durante el mandato del ultraderechista.
La idea surgió tras el reciente megaconcierto de Madonna en Río de Janeiro, quien interpretó una canción con la artista. drag queen brasileño Pablo Vittar vistiendo la camiseta “canarinha”.
La homofobia es un delito en el país desde mediados de 2019, pero a diario se registran agresiones a homosexuales y transexuales. Según organizaciones de derechos LGBTQ, 145 personas trans fueron asesinadas en 2023 y otras diez se suicidaron.
ama (afp, efe, ap)
