Con las reformas “seguimos protegiendo a las personas que llegan a la Unión Europea huyendo de guerras terribles, terror, torturas y asesinatos”, pero la responsabilidad estará más distribuida entre los Estados, afirmó Faeser según un comunicado. “Limitaremos efectivamente la migración irregular. Los procedimientos de asilo ya tendrán lugar en las fronteras exteriores de la UE si las personas tienen pocas perspectivas de recibir protección”, afirmó.
Faeser añadió además que las fronteras comunitarias abiertas sólo son posibles con una “fuerte protección” de las fronteras exteriores y que esta cuestión no debe dejarse en manos de “populistas de derecha que abusan de las personas que necesitan hacer campaña”. .
Las ONG de ayuda a los refugiados critican las nuevas medidas
“Las situaciones de emergencia catastróficas en las fronteras exteriores (de la UE) se han prolongado durante décadas y se han vuelto crónicas. El paquete legal institucionaliza las prácticas más brutales y represivas en las fronteras exteriores de la UE”, afirmó Maria Sonnek de la ONG Seebrücke.
La red NDO de organizaciones de inmigrantes afirmó también en un análisis publicado este jueves que la reforma obstaculizará significativamente el acceso a procedimientos de asilo justos y eficientes, lo que puede limitar “masivamente” el ejercicio del derecho fundamental al asilo.
La ONG ProAsyl habló de un “mínimo histórico” para la protección de los refugiados en Europa, ya que el pacto reduce, entre otras cosas, los estándares para los “terceros países” considerados seguros y permite aún más restricciones de derechos en situaciones de “crisis”.
El Parlamento Europeo aprobó este miércoles el pacto sobre migración y asilo, un complejo paquete legislativo al que las instituciones europeas dieron luz verde el pasado mes de diciembre pero para el que la cuestión de si recibiría el respaldo del Parlamento Europeo permaneció en la incógnita hasta el último momento. después de las críticas de muchos eurodiputados de diferentes grupos.
jov (efe, tagesschau)
Cómo los inmigrantes impulsan la pesca en España
La pesca en España difícilmente podría mantenerse a flote sin la inmigración. Pero incluso aquellos que asumen el trabajo duro buscan alternativas, porque el futuro de la industria pesquera es incierto.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
La noticia de la llegada de inmigrantes senegaleses a Canarias me trae recuerdos del peligroso viaje que realizó hace 17 años para el pescador Babou Diouf. En 2006, su arduo viaje lo llevó desde Senegal, a través del Mediterráneo, hasta su nuevo hogar en Burela, en la costa norte de España.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
Su experiencia en la pesca le aseguró a Diouf una nueva vida en España. Los españoles evitan cada vez más los trabajos extremadamente duros en la flota pesquera más grande de la Unión Europea, por lo que cada vez más inmigrantes están llenando ese vacío.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
Aproximadamente siete de cada diez tripulantes de la flota de Burela, en la comunidad autónoma de Galicia, son inmigrantes, explica Juan Carlos Otero, de la patronal de armadores de Burela. El puerto pesquero de Burela cuenta con 44 nacionalidades entre sus 9.450 habitantes, entre ellos 90 hombres de Senegal y 244 de Cabo Verde.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
Pero incluso con trabajadores como Diouf, la industria pesquera española no podrá sobrevivir, advierten algunos expertos. En Burela, donde alrededor de la mitad de la flota pesca con palangre (un tipo de arte), el sector podría colapsar dentro de tres años, después de que la UE incluyera esta práctica en sus restricciones al arrastre de fondo.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
Diouf trabaja junto a indonesios, senegaleses y españoles en el “Sarridal”. Recoge las redes, limpia y envasa la merluza en turnos de 14 horas. No le importa el cansancio y la falta de sueño. “Ha sido así toda mi vida”, dice. “Duermo cuando puedo, no cuando quiero”, añade.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
Una mirada al interior del estrecho camarote del pesquero “Sarridal”. La inmigración es bienvenida por los locales. “Hay muy pocos jóvenes españoles, por lo que el futuro pasa por la formación de inmigrantes”, afirma el capitán del “Sarridal”, Francisco González García. Según él, la industria pesquera española no podría sobrevivir sin los inmigrantes.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
Pescadores indonesios tomando café. Los indonesios son tan apreciados por su pesca con palangre que los armadores pagan sus vuelos a España. Otros, como los senegaleses, encuentran trabajo de boca en boca o apareciendo en el muelle, donde, si tienen permiso de residencia, les ofrecen contratos.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
Aunque Diouf está satisfecho con sus ingresos, que le permiten pagar un apartamento, alimentar a su familia y enviar dinero a sus hijos en Senegal, se está preparando para el tiempo después de pescar. Practica trabajar con motosierras, cortadoras de césped y camiones. El año 2008 fue el peor de su vida, cuando sólo tuvo tres semanas de trabajo. Aquí, Diouf sostiene a su hija en brazos.
Imagen: NACHO DOCE/REUTERS
