“Me cuesta disfrutar el momento, porque siempre estoy pensando en el futuro” – .

La actriz habla con LOC sobre su regreso a España, su necesidad de sentar cabeza, su salud mental, sus preocupaciones, sus nuevos proyectos y lo enamorada que está de la vida.

Desigual celebró este jueves en Barcelona el evento del año: un pasacalle, en la plaza Rosa dels Vents, y una fiesta inolvidable en su sede, donde llegaron numerosas celebridades. Entre ellas, Paris Jackson -la hija del fallecido rey del pop-, la actriz de Netflix Andrea Chaparro, la modelo Amelia Gray y Ester Expósito (24), que llevaba meses sin hablar con la prensa. Sin embargo, en esta ocasión el madrileño se mostró amable y aceptó las preguntas de todos los presentes con mucha simpatía. “Estoy feliz de estar aquí. “Me siento bien, estoy relajada y tengo muchas ganas de pasar un buen rato”, dijo a LOC.

Regresa a España como estrella internacional e icono de estilo. Se ha convertido en un referente. ¿Te sientes tan poderoso?
Simplemente creo que tengo un gran locutor en las redes y por eso ciertas cosas que hago o miro se vuelven tendencia. Pero no sé si soy un “ícono de estilo”, porque no tengo mucha estrategia de estilo. Estoy haciendo lo que quiero y me gusta. Evidentemente pienso en cosas. Al principio de mi carrera no me preocupaba mucho, pero con el paso de los años empecé a prestarle más atención.
Digamos entonces que se ha alzado como icono, pero sin intención de hacerlo…
No es que esté intentando que la gente me considere un ícono, ¡eso me parece mucha responsabilidad! Si ya sientes presión cuando vas a un photocall y tienes que elegir look, imagina la presión que sientes cuando piensas que tú también tienes que ser referente. Te vuelves un poco loco y sufres un poco. Entonces me pongo lo que siento y hoy me pongo Desigual. Una marca que está de moda y que tiene algo muy fresco y joven.
Además de en la moda, está triunfando en el cine. Cuéntame sobre su nuevo proyecto, llamado El llanto.
Es una película de terror, que siempre ha sido mi género favorito como espectador. Entonces, como actriz, es un honor poder participar en ese tipo de cine. He tenido la suerte de hacer dos películas de terror muy especiales: ésta, que se estrenará en octubre, y Venus, donde me lo pasé genial rodando. Pero con El llanto fue diferente… Porque es una película muy psicológica, muy metafórica.
¿Y cómo se refleja eso en tu carácter?
Creo que esta película tiene una energía que no había visto antes en mí. Llevo peluca, tengo el pelo negro y creo que es genial verme de otra manera.
Y ahora mismo, ¿estás rodando algo nuevo?
Hmm… no puedo decir mucho. Pero voy a empezar a rodar algo que me hace mucha ilusión, porque es aquí, en España. Llevo varios meses viviendo en el extranjero, en México, y estoy feliz de regresar a casa. Además, es una película con un director con mucho talento y un guión escrito por otro director, al que admiro mucho. Pasamos cinco años intentando hacer la película y, finalmente, será posible realizarla.
Aun así, imagino que se sacará tiempo para descansar, tomarse unas vacaciones…
Sí, eso es lo que quiero: descansar y viajar. Sobre todo, por España, que me apetece. Como siempre quiero ir a Galicia, a mi pueblo, a ver a mis amigos. Y además, creo que una escapada al aire libre también me vendría bien.
Lleva una vida agitada, con una agenda muy ocupada. ¿Cómo está tu salud mental?
Lo estoy haciendo bien. Ha sido muy bueno para mí estar trabajando en el extranjero y tener la oportunidad de vivir en México, que es un país que adoro y tiene una cultura maravillosa. Para mí ha sido una suerte increíble. Y ahora también me hace bien volver a casa. ¡Estaba deseando volver! Creo que eso me dará como… Paz. Creo que necesitaba volver y sentarme, porque es verdad que estuve arriba y abajo, sin parar. Siempre me lo paso genial. Pero es verdad que he estado trabajando mucho, así que también estoy un poco cansado.
Pese a ello, imagino que se siente muy satisfecha con su vida, su carrera y todo lo que ha logrado.
Me siento un privilegiado, porque -desde muy joven- me han ido bien las cosas en lo que siempre ha sido mi sueño, cuando era niño. Pero también siento lo que todos sienten… Bueno, no sé si todos, pero hablo de una lucha interna conmigo: me cuesta disfrutar el momento y lo que tengo, porque siempre estoy pensando en el futuro, sobre lo que viene por delante. Pero estoy tratando de apreciar el momento y las cosas hermosas. Aunque, a veces, resulta complicado. No es así de fácil.
 
For Latest Updates Follow us on Google News