Deutsche Bank se ha mostrado optimista respecto del dólar estadounidense desde principios de año y no ve ninguna razón para dar un giro a la luz de tres factores que impulsan el desempeño superior de Estados Unidos.
1) Déficits fiscales estadounidenses
Estados Unidos aprobó un déficit presupuestario del 5-6% del PIB por quinto año consecutivo y DB ahora llama al gasto excesivo “una gran coalición” entre republicanos y demócratas e incluye “déficit de tiempos de guerra con pleno empleo”. Si comparamos esto con el menor gasto en Europa y otros lugares, tenemos un problema fiscal inminente, pero mientras tanto un crecimiento fuerte y fortaleza del dólar.
2) El estatus de refugio seguro del dólar
El dólar puede salirse con la suya con déficits fiscales elevados porque el sector privado nacional está financiando totalmente el gasto del sector público. En segundo lugar, dado que la Reserva Federal mantiene la credibilidad inflacionaria, significa que las tasas del Tesoro tendrán que ser más altas. Finalmente, alardean del estatus de reserva del dólar, que parece invencible. También señalan que no hay nada inusual en que el dólar estadounidense y el oro se recuperen al mismo tiempo.
3) la deflación de China
“En ningún lugar es más evidente el dominio del dólar que en la continua presión alcista sobre el USDCNY. Dados los enormes superávits externos de China, esto es indicativo de una persistente fuga de capitales y está totalmente alineado con el repunte combinado del oro y el dólar este año”.
Finalmente, señalan que las amenazas de intervención de Japón “no son creíbles” porque la debilidad del yen está impulsada por flujos hacia operaciones de carry trade.
