El 19 de abril de 1970 se llevaron a cabo elecciones presidenciales en Colombia y los resultados dados a conocer por el Registro Civil en la mañana del 20 de abril indicaron que había ganado el candidato Misael Pastrana, del Partido Conservador, derrotando supuestamente al general Gustavo Rojas Pinilla, candidato de el partido Alianza Popular Nacional, Anapo.
¿Cómo se fundó el M-19?
Los seguidores de Rojas Pinilla, militar que había encabezado un gobierno de facto entre 1953 y 1957, denunciaron fraude y comenzaron a movilizarse, pero Rojas Pinilla no quería que Colombia volviera a arder, evocando la tragedia del 9 de abril de 1948. los integrantes de una facción llamada Anapo Socialista, se separaron de su líder y, junto con otros jóvenes revolucionarios, dieron origen al Movimiento 19 de Abril, M-19.
Su aparición fue precisamente hace 50 años, cuando aquella guerrilla urbana divulgó su existencia, con acciones que darían mucho de qué hablar en los años siguientes.
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Un robo que dio la vuelta al mundo
Para darse a conocer, el M-19 robó la espada de Simón Bolívar en la Quinta del Libertador en Bogotá. Cabe señalar que su existencia como grupo armado no fue similar a la de las otras guerrillas en Colombia, ya que no se inspiró en la revolución cubana ni en el comunismo de la Unión Soviética. Su principal objetivo tampoco era tomar el poder, sino, según ellos, lograr una democracia participativa tras el Frente Nacional y el fraude contra las elecciones presidenciales de 1970.
Otra diferencia que tuvo el M-19 respecto a otras guerrillas que se desmovilizaron luego de alcanzar acuerdos de paz, como parte del EPL, el PRT, el Quintín Lame y más recientemente las FARC, es que su transición a la política como Alianza Democrática M -19 sí tuvo repercusión entre 1990 y 1994. Tanto es así que su participación fue vital para la realización de la Asamblea Constituyente que derivó en la redacción de la Constitución Política de 1991.
Hechos que marcaron la historia del M-19
A finales de los años 1970, el M-19 se llevó más de 5.000 armas del ejército en el Cantón Norte de Bogotá, lo que desató una reacción de las fuerzas militares y del gobierno de Julio César Turbay Ayala, quienes recurrieron a diversos medios para afrontar tan catastrófica pérdida.
En varias ciudades fueron capturados cientos de militantes del M-19, así como civiles comprometidos con las luchas sociales, y para obtener información recurrieron a la tortura. La mayoría de las armas fueron recuperadas y los miembros del M-19 fueron recluidos en cárceles.
Asimismo, el 27 de febrero de 1980 el M-19 atacó la Embajada de la República Dominicana, donde se realizaba un cóctel con diplomáticos de varios países, a quienes tomaron como rehenes. Después de casi dos meses de negociaciones, el evento terminó sin derramamiento de sangre y con varios de sus protagonistas refugiados en Cuba, que en esos años acogió a guerrilleros latinoamericanos y les dio entrenamiento militar.
En medio de una espiral de violencia en la sociedad colombiana, el M-19 también participó en un enfrentamiento abierto con el cartel de Medellín de Pablo Escobar. Tanto el cartel de Medellín como las fuerzas de seguridad colombianas causaron numerosas bajas al grupo.
Sobre esas peleas con el cartel de Medellín, Diego Arias, quien se unió al M-19 en 1979 y participó en la batalla de Yarumales, los diálogos de paz con el gobierno de Belisario Betancur en Corinto, habló en Puntos de Vista y aseguró que el M- 19 no tenía vínculos con Pablo Escobar: “No tengo idea ni conocimiento de una posible relación entre el M-19 y Pablo Escobar. De hecho, éramos una guerrilla con muchas limitaciones económicas”.
