Los equipos de la misión Boeing Crew Flight Test de la NASA tienen previsto ahora lanzarse a la Estación Espacial Internacional (ISS) este miércoles tras su suspensión los días 1 y 2 de este mes.
Los técnicos e ingenieros de United Launch Alliance (ULA) trabajaron durante la noche y el domingo para evaluar el equipo de apoyo terrestre en la plataforma de lanzamiento que tuvo problemas durante la cuenta regresiva y canceló el intento de lanzamiento del 1 de junio. El equipo de ULA identificó un problema con el suministro de energía con conexión a tierra única dentro de uno de los tres chasis redundantes que proporciona energía a un subconjunto de tarjetas de computadora que controlan varias funciones del sistema, incluida la tarjeta responsable de las válvulas de repostaje estables para la etapa superior Centaur. Estos tres chasis deben entrar en la fase terminal de la cuenta atrás del lanzamiento para garantizar la seguridad de la tripulación.
El domingo, se retiró el chasis que contenía la unidad de potencia de tierra defectuosa, se inspeccionó visualmente y se reemplazó por un chasis de reemplazo. No se observaron signos de daño físico. Se realizará un análisis completo de fallas de la unidad de potencia para comprender mejor la causa raíz. Mientras tanto, ULA ha completado las comprobaciones funcionales de los nuevos chasis y tarjetas, y Todo el hardware funciona normalmente.
Los responsables de la misión han elegido este miércoles para el nuevo intento de lanzamiento. El 45º Escuadrón Meteorológico de la Fuerza Espacial de EE. UU. predice un 90% de posibilidades de condiciones climáticas favorables, siendo los cúmulos la principal preocupación climática. Otra oportunidad está disponible el jueves.
Los astronautas de la NASA Barry “Butch” Wilmore y Suni Williams, la tripulación de vuelo de prueba de la nave espacial Starliner de Boeing, permanecen en cuarentena en el Centro Espacial Kennedy de la NASA.
