Héctor Alterio Vuelve a subir a los escenarios a los 94 años con una obra escrita y dirigida por su pareja de casi 60 años, Angela Bacaicoa, una pequeña historiacon el que representa su viaje de ida y vuelta a Argentina, un texto en el que no hay sombra de despedida.
“No, no, ni se me ocurre pensar en eso, que me despidan”, dice tajante y sonriente Alterio en una entrevista en el Teatro Reina Victoria de Madrid donde los días 21, 22 y 23 de junio subirá al escenario con una obra con la que tiene prevista una gira.
“El teatro para mí es entretenimiento, me fortalece y me reafirma, me siento como cuando de adolescente entretenía a mis amigos y jugaba con mi madre” a menos que fuera otra persona, explica el actor hispano-argentino (Buenos Aires, 1929).
una pequeña historia Nació -dice Bacaicoa- del deseo de algunos productores argentinos de que volviera a los escenarios de la ciudad que lo vio nacer y se le ocurrió “la idea de juntar un poco de la experiencia que estaba haciendo aquí – un trabajo con textos León Felipe– y su amor por los tangos”.
Un viaje por el exilio y luego el regreso a Buenos Aires, con la música de piano de Juan Esteban Cuacci. Con el tango como hilo conductor, Alterio mezcla sus emociones con texto de León Felipe, un autor del que se enamoró y hizo suyo, exiliado como él.
Alterio comenta con ternura que es un actor “dócil” que se deja dirigir, mientras ella reacciona y señala: “Sería de mala educación decir que yo dirijo a Alterio, aunque le digo algo”.
Con agudo sentido del humor, Alterio dice que lo que más echa de menos en Madrid es el “tango y la radicheta”, una ensalada amarga muy popular.
Con una exitosa carrera en su país, el actor se vio obligado a exiliarse cuando en una gira por España fue alertado de que aparecía en una lista de Triple A, una organización terrorista de extrema derecha en Argentina.
“Significó todo un cambio, me adapté porque no tenía otra opción, era la única opción de subsistencia, no tenía alternativa”, recuerda con cierta tristeza.
Sin embargo, asegura que en España encontró “manos generosas, espontáneas, inesperadas” que le ayudaron “en momentos delicados. Eso es inolvidable para mí”. En Madrid siguió con su carrera, puliendo su acento “por necesidad y con total disfrute”.
Pero no puede evitar la melancolía al recordar el primer viaje de regreso a su país. “Sentí el cariño de la gente”, que lo reconocieron y lo aplaudieron; desconocidos que le animaron a salir a la calle para sentirse “mirado y agradecido, y le hicieron olvidar que tenía que volver a un lugar que no era el suyo”.
La situación de Argentina desde que fue elegido presidente Javier Milei Lo tiene sumergido en el “horror”, pero no sólo “nos preocupa lo que está pasando en Argentina, sino también lo que está pasando en el mundo entero”, dice Bacaicoa.
“¿Qué salió mal? ¿Cómo puede ser que el segundo partido de Alemania sea un partido nazi? “Estoy muy sorprendido”, a lo que indica con calma que “hay que esperar a que cambie”.
Fuente: EFE. Fotos: EFE/Daniel González
