La Organización de Naciones Unidas (ONU) anunció hoy la suspensión de sus operaciones nocturnas durante al menos las próximas 48 horas en la sitiada Gaza tras advertir de graves problemas de seguridad.
El portavoz del secretario general (António Guterres), Stéphane Dujarric, aseguró a la prensa que las circunstancias actuales impactan al personal sobre el terreno y a la población civil mientras los trabajadores intentan ayudar.
El portavoz confirmó que la decisión se tomó tras el asesinato de siete miembros del personal de la ONG World Central Kitchen (WCK) por un ataque israelí el pasado lunes.
“La gente está muriendo y es esencial que sigamos entregando ayuda (…) Necesitamos personal y suministros para poder movernos libre y seguro por la Franja de Gaza”, afirmó Dujarric durante una sesión informativa.
La misión de World Central Kitchen había sido acordada previamente con las autoridades israelíes y su coche estaba bien señalizado, según informes difundidos por la propia entidad y la Organización Mundial de la Salud.
El equipo se movía a través de una zona no conflictiva en dos vehículos blindados con el logotipo de WCK y otro vehículo no blindado, según un comunicado publicado el martes en el sitio web oficial de la ONG.
A pesar de coordinar los movimientos con las Fuerzas de Defensa de Israel, el convoy fue alcanzado cuando salía del almacén de Deir al-Balah, donde habían descargado más de 100 toneladas de ayuda alimentaria humanitaria traída a Gaza por vía marítima.
“Esto no es sólo un ataque contra WCK, es un ataque contra organizaciones humanitarias que aparecen en las situaciones más extremas donde los alimentos se utilizan como arma de guerra. Esto es imperdonable”, afirmó Erin Gore, su directora ejecutiva.
Por su parte, las autoridades israelíes reconocieron su responsabilidad aunque aseguraron que era una “consecuencia” del conflicto.
Tras los primeros reportes, se difundieron imágenes de los vehículos de la organización no gubernamental que mostraban grandes agujeros en los techos.
La asociación liderada por el chef español José Andrés también anunció una pausa en su labor humanitaria en Gaza antes de tomar una decisión final.
El Secretario General de la ONU describió el suceso como “un resultado inevitable de la forma en que se está llevando a cabo la guerra”.
“Demuestra una vez más la urgente necesidad de un alto el fuego humanitario, la liberación incondicional de todos los rehenes y la ampliación de la ayuda a Gaza, como exigió el Consejo de Seguridad en su resolución de la semana pasada”, dijo ayer Guterres.
