Respecto al tratamiento de la ley de Bases y el paquete fiscal en el Senado nacional que mantuvo en vilo al país el pasado miércoles y jueves, al sector minero le interesaron especialmente dos puntos: qué iba a pasar con el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) y cómo iban a ser los cobros por regalías mineras.
Finalmente, al aprobar los dos proyectos, la Cámara Alta realizó cambios al RIGI y a las regalías, que es un impuesto que reciben las provincias. Ahora deberán ser revisados nuevamente por Diputados.
En cuanto al RIGI, del que depende, por ejemplo, el desarrollo del proyecto cuprífero Taca Taca en Salta, se mantuvo el monto base de inversiones en US$ 200 millones y se modificó el artículo 165 para que solo cubra las actividades de industria forestal, infraestructura , minería, energía, tecnología, turismo, petróleo y gas y acero.
En tanto, “al menos el 20% del monto total de la inversión” quedó disponible para proveedores locales, siempre y cuando “la oferta esté disponible y en condiciones de mercado en términos de precio y calidad”. Dicho porcentaje mínimo deberá mantenerse durante las etapas de construcción y operación.
Otro retoque fue en el artículo 196, sobre incentivos cambiarios, que limita la obligación de liquidación en el mercado cambiario a las divisas recibidas por las exportaciones de productos generados por los proyectos. Será del 20% a los dos años de iniciada la inversión; el 40%, después de tres años; y el 100%, a partir de los cuatro años.
Concurso provincial
En cuanto a las regalías mineras, que están dentro del paquete fiscal de leyes, el Senado nacional revirtió lo establecido en Diputados al subirlas del 3% al 5%. Pero este porcentaje se aplica a minas que ya están en producción o en fase de construcción al momento de promulgarse la ley.
Para nuevos proyectos, las provincias estarán autorizadas a cobrar hasta un 5% sobre el valor “cabeza de mina” del mineral extraído.