Kelly Johana Materán, madre de la menor asesinada en Girón, brindó detalles sobre la relación entre el presunto agresor y la vecina que habitualmente cuidaba a su hija.
“Eran pareja”, confesó. De hecho, la mujer contó que gracias a su vecina decidió migrar a Colombia. “Ella es una amiga mía de Venezuela. Vivíamos en el mismo barrio. Ella migró primero que yo y fue la persona que me animó a venir a este país. Por eso conocí a ese señor que me alquiló el cuarto de la casa en Rincón de Girón”, dijo.
Su amiga llegó un año antes que ella. Ella se instaló en el barrio y le contó cómo era vivir en Colombia, específicamente en Girón. Convencida por ella, decidió viajar con sus familiares y alquilar la primera habitación en el segundo piso de la casa, ubicada en la calle 35 carrera 18-54.
Por la habitación pagué 220.000 pesos fuera de servicios. Ese fue el acuerdo al que llegó con Alirio Gualdrón Rojas, quien estaba a cargo del arrendamiento general del segundo piso de la casa.
“Yo vivo en la primera habitación del segundo piso, mis hermanos viven en la habitación del medio y el señor vivía en la tercera”, explicó la madre del menor.
Se lo confió al vecino
La madre de la niña dijo que el miércoles 1 de mayo, día en que ocurrió la tragedia, fue a trabajar y dejó a la niña a cargo de su amiga, como solía hacer. “Después me enteré que mi hija estaba desaparecida. Lo que me dijeron es que estaba jugando con una amiga en las escaleras. La señora que la estaba cuidando le dijo a la niña que no se alejara de ella porque le iba a dar empanadas para desayunar”.
Según Kelly Materán, esa fue la última vez que su amiga vio a la niña. Desconocen si la menor fue a jugar a la plaza y allí se la llevó el presunto agresor. El niño que jugaba con ella dijo que la niña se despidió de ella antes de irse con un hombre.
Estas versiones son objeto de investigación. La Fiscalía General de la Nación también interrogará a la mujer que cuidaba a la niña al momento de su desaparición.
¿Qué pasó con el presunto asesino del menor?
Alirio Gualdrón Rojas, de 59 años y originario de Aratoca (Santander), fue enviado a prisión por un juez de control de garantías por el delito de desaparición forzada agravada.
Gualdrón no aceptó los cargos que le presentó la Fiscalía General de la República. Antes de ser presentado ante el Juez, el imputado fue trasladado al Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Bucaramanga, donde se le practicaron algunas pruebas que eventualmente podrían darle un giro a la investigación, para encontrar más detalles que conduzcan al esclarecimiento del crimen. . Eso se sabrá en la etapa de juicio.
Entre los detalles revelados durante la audiencia de acusación, los investigadores indicaron que el menor recibió dos golpes en la cabeza con un objeto contundente. Uno provocó una herida abierta.
Por el momento se espera el dictamen de Medicina Forense que esclarezca las causas de la muerte de la menor y también si fue víctima de abuso sexual.
