La Fiscalía de Santander reveló nuevos detalles del grupo criminal que se dedicaba a la alteración y contaminación de conocidas bebidas que se vendían en comercios de barrio de Bucaramanga.
Según información proporcionada por la Fiscalía de Santander, el grupo delictivo era conocido como ‘Los Lúpulos’, el cual se dedicaba a la contaminación y alteración de bebidas gaseosas y alcohólicas.
Alteraban el líquido de conocidas marcas de refrescos y cervezas y lo hacían en fincas, sin medidas de higiene y salubridad, para luego comercializarlos con intermediarios en tiendas y outlets de Bucaramanga, Girón, Piedecuesta, Floridablanca y Lebrija.
“Según la investigación se evidenció que esta estructura venía delinquiendo desde el año 2020. Obtuvieron envases y cajas reutilizables, así como tapas de plástico y metal reciclado para distribuirlos en vehículos con marcas falsas”, indicó la Fiscalía .
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Los allanamientos y detenciones de cuatro personas fueron realizados por la Policía y la Fiscalía en los municipios de Girón, Lebrija y Bucaramanga en Santander.
En el norte de la ciudad de Bucaramanga, la Policía logró ubicar una bodega donde se manipulaban y almacenaban los productos utilizados para alterar bebidas.
“En el almacén se incautaron varias cajas de productos reenvasados de bebidas carbonatadas y alcohólicas, las cuales fueron sometidas a las pericias correspondientes, así como envases vacíos, tapas y embalajes, entre otros”, informó la Fiscalía.
Los capturados por los delitos de concierto para delinquir, usurpación de derechos de propiedad industrial, corrupción de derechos de alimentos, derechos de obtentor, falsificación de marcas y corrupción de productos alimenticios, médicos y profilácticos fueron identificados como John Fredy Monsalve, Néstor Mauricio Beltrán. Ronaldo Alejandro Romero y Luis Enrique Niño. Cargos que no fueron aceptados por los imputados, sin embargo, un juez de garantía les dictó medidas de seguridad.
Así alteraron las bebidas
Lo que encontraron los investigadores fue que estas personas se dedicaban a la alteración y reenvasado de refrescos y cervezas. Tomaron el líquido original y le agregaron otras sustancias para aumentar el volumen.
“Lo que hicieron fue comprar bebidas originales, les agregaron otras sustancias como colorantes para hacer dos o tres botellas más y así las comercializaron alterando su sabor original”, dijo la Policía.
Dentro de las investigaciones se conoció que en comercios y expendios de la zona metropolitana de Bucaramanga se vendían refrescos y cervezas alteradas.
En los allanamientos fueron incautadas 4.480 botellas de distintos volúmenes y marcas de refrescos y cervezas, las cuales eran utilizadas para la falsificación y alteración de los productos.
La Policía aseguró que continuará con las investigaciones para determinar la complicidad de las personas que se encargaban de adquirir estos productos y ofrecerlos en comercios de barrio.
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