En una acción conjunta entre las Fuerzas Militares y la Policía Nacional se llevó a cabo la ‘Operación Vida Pacífico’ con el fin de desmantelar operaciones mineras ilegales en los municipios de Buenaventura, López de Micay y en el Río Naya.
Como resultado de este operativo fueron intervenidas tres unidades de producción minera y quedaron destruidas seis excavadoras, dos motobombas y un motor industrial. Representando un duro golpe a las organizaciones criminales que lucran con la extracción ilegal de minerales.
Según el coronel Edgar Flórez Cañas, director de Carabineros y Protección Ambiental, estas máquinas amarillas extraían alrededor de 5.000 gramos de oro mensuales, utilizando aproximadamente 25 kilogramos de mercurio que terminaron contaminando los afluentes de agua de la región.
La devastación causada por esta actividad ilícita es alarmante, ya que estas máquinas destruidas eliminaron más de 3.000 metros cúbicos de vegetación por día, lo que representa una amenaza constante para los ecosistemas del Pacífico. El valor estimado de los artículos destruidos es de aproximadamente 1.500 millones de dólares.
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