Los días de la pandemia de Covid, y especialmente sus noches, nos dejaron a todos frente al miedo a lo desconocido, frente a la finitud y la muerte. Para Marcelo Justo, también periodista, ese espejo oscuro le devolvió los sueños, y esos sueños se transformaron en historias. Aquellas noches locas, el columnista del diario “Página/12”, corresponsal en Reino Unido, empezó a dormir con una libreta abierta y un bolígrafo a su lado. Y cada vez que despertaba escribía lo que quedaba entre el sueño y la vigilia. Estos materiales, convulsionados por ese presente incierto del virus pero sobre todo por el pasado argentino y su dictadura, se convirtieron en historias que primero aparecieron en la contraportada del periódico en el que trabaja y ahora, más ampliadas y sumadas a otras, se convirtieron en el libro “El regreso de la noche”.
“No sé si fue ese shock con la muerte lo que nos despertó a la pandemia, no sé si eso me llevó al año 1977 cuando salí del país. No sé si ese shock que significó la pandemia me llevó a ese pasado, a revivir ese pasado. Pero algo así pasó”, dice Marcelo Justo.
CEn presencia del autor, mañana, a las 19, en la sala azul de la Biblioteca de la Universidad Nacional del Comahue en Neuquén y el viernes, en la sala Astor Piazzolla del Complejo Cultural Cipolletti, se presentará el libro, su primer libro de ficción, se presentará .
Los sueños, o más bien la materia que de ellos surgía, eran prolíficos. Sólo escribió durante un año y medio. El editor de Equidistancia los leyó en la contraportada del periódico, y lo contactó para finalmente juntarlos en el libro.
¿Hay algún tema que los unifique? Marcelo Justo así lo cree. “Si hubiera que decir el tema más abstracto que unifica el libro, diría este: la historia, el sujeto que la padece y el margen que queda, que es la vida misma”, dice, de forma bastante breve.
Pero luego se expande un poco más y enumera algunas de las tramas de los 14 cuentos: “El regreso del pasado y una fuga que se repite y no termina, sueños que cambian la realidad y el tiempo, el nuevo año de una dictadura, el corrupción adulta de sobres y tratos, una ciudad utópica sepultada por la represión, una venganza que espera toda la vida. Algunos fueron publicados en las contraportadas del periódico y aquí conocen el formato más amplio de un libro. Otros trazan un arco que va desde la noche de la dictadura argentina hasta su regreso actual disfrazada de formato del siglo XXI. La historia es la pesadilla de la que quieren despertar los protagonistas de estas inolvidables historias en un mundo que parece haber perdido el rumbo. Algunos lo logran, otros salen a la calle con los ojos cerrados porque no saben qué mundo les espera y mucho menos si quieren verlo”.
“No todas estas son historias sobre la dictadura. La última historia incluso hace referencia al presente y al futuro, que es la que termina con un personaje que sale a la calle con los ojos cerrados, palpando las paredes, sin saber qué mundo se va a encontrar o si quería. verlo”, dice. .
El título también tiene algunos presagios sobre el presente. Esto es lo que cree el autor: “El regreso de la noche tiene que ver con la actualidad. Y es bastante curioso porque lo había escrito en 1992, pero lo reescribí después. Se trata de alguien que regresa a su país y vuelve a una escena del pasado que resulta traumática tanto para él como para su familia. Lo curioso de esa historia es que hubo una resignificación no sólo de la Argentina sino de todo lo que está pasando a nivel mundial, con el regreso de la ultraderecha, con las guerras. Y es algo que recuerda un poco al período de entreguerras en Europa, con el nazismo, el fascismo. “Estamos en una situación mucho más peligrosa: una noche que puede volver”.
