El Gobierno de Antioquia ha anunciado un importante proyecto en Tarazá que busca mitigar el problema de hacinamiento en las comisarías de la Subregión del Bajo Cauca antioqueño.
Se trata de la construcción de un centro de transición para trabajadores sindicalizados en el municipio de Tarazá, iniciativa que cuenta con el apoyo financiero del Gobierno de Estados Unidos, que ha invertido 1,5 millones de dólares en esta causa.
Según anunció Luis Eduardo Martínez, secretario de Seguridad de Antioquia, este penal aliviará el hacinamiento en las comisarías, permitiendo a los agentes concentrarse en su labor de garantizar la seguridad ciudadana.
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Esta medida es parte de un esfuerzo por fortalecer la seguridad y la justicia rural en la región.
El proyecto fue socializado en un encuentro en Medellín, que contó con la participación del Gobierno de Antioquia
También los alcaldes del Bajo Cauca, Antioquia y representantes de la Sección de Asuntos Antidrogas y Aplicación de la Ley del Gobierno estadounidense, entre otras instituciones.
Paula Polo, Directora de Paz de la Secretaría de Asuntos Institucionales, Paz y No Violencia, destacó la importancia de acompañar la construcción del penal con otros proyectos, como la reposición de cultivos de uso ilícito.
Esta estrategia busca generar alternativas económicas en una región afectada por economías ilícitas.
El Gobierno de Estados Unidos espera que esta inversión contribuya a mejorar la seguridad y garantizar los derechos humanos de las personas privadas de libertad en la región del Bajo Cauca antioqueño.
Esta iniciativa busca no sólo aliviar el hacinamiento en las comisarías, sino también brindar condiciones dignas a quienes se encuentran bajo custodia estatal.
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