En la madrugada del jueves (11/04/2024), Rusia lanzó más de cuarenta misiles y casi cuarenta drones contra diferentes puntos de Ucrania. Una nueva ola de ataques dirigidos principalmente a infraestructuras críticas de Ucrania, denunció el presidente Volodymyr Zelensky.
“Una parte de los misiles Shahed y (los drones) podrían ser derribados. Lamentablemente, sólo una parte”, afirmó Zelensky en sus redes sociales, destacando la “vileza” de los ataques perpetrados por Rusia contra la región de Járkov y su capital homónima.
Según el jefe adjunto de la oficina presidencial ucraniana, Oleksi Kuleba, más de 200.000 personas se han quedado sin electricidad en esa región, contra la que Rusia ha intensificado sus ataques en las últimas semanas.
También fueron atacadas infraestructuras en las regiones de Kiev (norte), Zaporizhia (sureste), Odesa (sur) y Lviv (oeste), informaron las autoridades ucranianas.
Poco antes, el ministro de Energía, Herman Galushchenko, informó de ataques a “infraestructuras de generación y distribución en Kharkiv, Zaporizhzhia, Lviv y Kiev”. “Los trabajadores del sector están trabajando para reparar los efectos” de los ataques, afirmó el ministro en Facebook.
Rusia inició a finales de marzo su peor campaña de ataques contra el sistema eléctrico desde que a finales de 2022 dejó a millones de ucranianos sin luz y calefacción durante semanas con sus golpes al sistema energético. También en esta ola de ataques, buena parte de la infraestructura de generación y distribución de energía de Ucrania ha resultado dañada.
Zelensky volvió a pedir este jueves a sus aliados que reaccionen con urgencia para cubrir las “necesidades críticas” de Ucrania en materia de defensa aérea.
ies (EFE, AFP)
