Guayaquil/Quito, 28 mar (EFE).- Ascendió a dos el número de muertos en el motín ocurrido anoche en la Prisión Regional de la ciudad costera de Guayaquil, ocurrido mientras regía el estado de emergencia en Ecuador, confirmó este jueves el comandante de la zona 8, Víctor Herrera, afirmó que las víctimas mortales eran prisioneros.
En conferencia de prensa, indicó que también hay cuatro reclusos heridos, pero no detalló su estado de salud.
Según Herrera, tardaron tres horas en recuperar el control del centro penitenciario, donde “debido al descontento” entre los presos quemaron colchones e intentaron alterar el orden público.
“En este momento mantenemos el control de la Regional y se están realizando verificaciones tanto a los detenidos como a las pruebas que se encontraron”, comentó.
La madrugada de este jueves, el viceministro de Seguridad, Lyonel Calderón, informó que el motín dejó un muerto y cuatro heridos, pero aclaró que aún son cifras preliminares.
Al parecer los presos protestaban por el trato dado a los militares durante la presencia de las Fuerzas Armadas en el interior del penal en el marco del estado de emergencia y conflicto armado interno contra bandas criminales, declarado en enero pasado.
La madrugada de este jueves, familiares de los reclusos apostados en el exterior del penal portando globos blancos exigieron información sobre sus familiares y, en protesta, arrojaron agua a los camiones militares presentes en la zona.
Soldados armados permanecieron fuera del penal durante el día, mientras algunos familiares de los presos exigían información y poder visitarlos.
Los familiares portaban carteles que decían: “Paz”, “No abusen de sus derechos” o “están pagando su pena”, entre otros.
Patricia Pluas, madre de uno de los detenidos, expresó a Efe su preocupación “por el maltrato que están recibiendo los presos” desde el pasado enero, cuando se declaró el estado de emergencia y el conflicto armado interno, como medida para frenar la creciente ola. de violencia en aquel momento.
“Durante dos meses estuvieron desnudos, sólo con el interior, y durmiendo en el suelo, con una sola comida al día. Nuestros familiares están enfermos, además de que hay personas que han estado enfermas y no se les ha permitido el derecho a tener un médico, un medicamento de su familia”, dijo afuera del penal.
Por ello, comentó que el motín de anoche se debió a que los internos “ya están hartos de tanto maltrato”.
Pluas pidió al jefe de Estado, Daniel Noboa, “sensibilizarse” para que cesen los “maltratos”, pero consideró positivo que los centros penitenciarios hayan intervenido para que no haya más extorsiones entre los presos.
La mujer destacó que en los últimos meses no les han brindado información sobre la situación de sus familiares en prisión.
Algo que fue corroborado por otra mujer, que no se identificó, y que afuera del penal pidió que “dejen de maltratar y torturar” a los presos.
“Todos los días lloramos porque ni siquiera nos dan información”, comentó antes de señalar que los presos “cometieron su error, pero tienen para pagarlo encerrados lejos de su familia”.
La Cárcel Regional de Guayaquil ha sido una de las más intervenidas por la Policía y las Fuerzas Armadas durante el estado de emergencia, con operativos recurrentes para incautar armas y objetivos prohibidos a la población carcelaria.
De este penal se fugó entre finales y principios de diciembre el narcotraficante José Adolfo Macías Villamar (‘Fito’), líder de la banda criminal Los Choneros, que cumplía una condena de 34 años de prisión por tráfico de drogas, asociación ilícita y homicidio. de enero.
Hasta antes del inicio del estado de emergencia, Los Choneros, la banda criminal más grande y antigua de Ecuador, tenían el control del interior del penal, donde cobraban a los presos cuotas por el tipo de celda que utilizaban y también por la alimentación. entre otros elementos de una amplia red de extorsión, según testigos. EFE
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