Él Museo Británico anunció el jueves el nombramiento de nicolas cullinan como su nuevo director, en sustitución Hartwig Fischerquien renunció tras el escándalo que reveló en 2023, que 2.000 antigüedades había sido robado o dañado durante un período de más de 20 años en el museo.
Cullinan, de 46 años, llegará al museo en los próximos meses procedente del Galería Nacional de Retratosdonde es director desde abril de 2015. El historiador del arte, que fue curador del Museo de Arte Metropolitano de Nueva York y Tate Moderno de Londres, calificó de “un honor” dirigir “uno de los grandes museos del mundo”.
Fischer renunció en agosto del año pasado, poco después de que se determinara que miles de artefactos de su colección estaban “desaparecidos, robados o dañados”. Según las hipótesis de investigación del robo y tras haber recuperado 350 de las 2.000 piezas, las autoridades creen que un registro insuficiente fue lo que permitió que alguien que sabía del asunto las fuera sustrayendo poco a poco sin ser detectado durante décadas. Desde entonces, el museo ha estado bajo la dirección del director interino. Marcos Jones.
El presidente del museo, George OsborneDijo que Cullinan fue elegido porque es un “líder probado” que supervisó la renovación de la Galería Nacional de Retratos.
El Museo Británico fue fundado en 1753 a partir de la colección original de Hans Sloane (1660-1753), un médico y naturalista irlandés que hizo su fortuna gracias a su matrimonio con un rico propietario de una plantación de esclavos en Jamaica.
El origen del Museo Británico, en realidad, no dista mucho del de otros museos y colecciones reales o nacionales, formados gracias a los gustos de príncipes, cortesanos y comerciantes, imitados primero por los súbditos y luego por los ciudadanos.
Hoy es uno de los más famosos del mundo, con una colección de unos 8 millones de objetos. Tras el robo de más de 2.000 piezas, el Museo anunció que digitalizará toda su colección y aceptó que, según relevamientos, la institución cuenta con 2.400.000 objetos no catalogados o parcialmente catalogados que serán debidamente documentados.
Pero, al igual que otros museos occidentales, está siendo presionado para que devuelva objetos obtenidos durante la época del Imperio Británico, como los mármoles del Partenón.
Muchas de las esculturas que decoraban la fachada del antiguo templo ateniense se encuentran en el Museo Británico desde el siglo XIX, y Grecia las reclama. En Inglaterra, las piezas son conocidas como mármoles de Elgin, eufemismo superlativo, ya que fue Lord Elgin, embajador en Constantinopla, quien las compró a los turcos a principios del siglo XIX en circunstancias aún controvertidas (la legalidad de la adquisición). .
Con información de AFP
