Palestina.- El Ejército israelí vivió este sábado su jornada más mortífera desde enero, cuando una gran explosión mató a 8 soldados que se encontraban en un vehículo blindado en Rafah, en el sur de la Franja. Las Brigadas al-Qasam, brazo armado de Hamás, reivindicaron el ataque. Entre los muertos se encontraba el capitán Wassem Mahmoud, subcomandante del 601º Batallón de Ingeniería del ejército israelí. Los nombres de los otros fallecidos no se han hecho públicos, aunque sí se ha informado a sus familiares.
La explosión, que ocurrió a las 5:15 am hora local, fue parte de una compleja emboscada llevada a cabo por combatientes de las Brigadas al-Qasam en el barrio saudita de Tal al-Sultan, al oeste de Rafah. Según la organización islamista, atacaron un vehículo blindado de ingeniería de combate Namer con un proyectil Al Yassin 105, lo que provocó su incendio y la muerte de los ocho soldados. El Ejército israelí, por su parte, explicó que la explosión de una bomba impactó en el vehículo, cargado con material explosivo, provocando una gran detonación. El incidente esta bajo investigación.
El Ministro de Defensa, Yoav Gallant, expresó sus condolencias en la red social X, diciendo: “Inclino mi cabeza junto con todo el pueblo de Israel en memoria de los héroes que cayeron en defensa del pueblo y la tierra”. El ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, también rindió homenaje a los soldados caídos.
Desde que las fuerzas armadas israelíes entraron en Rafah el 6 de mayo, la ciudad ha sido uno de los centros de la ofensiva y fuente de muchas víctimas. En total, 307 soldados han muerto en Gaza desde el inicio de la operación terrestre y al menos otros 1.500 han resultado heridos. Si se incluye el ataque de Hamás del 7 de octubre, el número total de muertos supera los 620.
Equipos de ayuda y rescate.
Los bombardeos israelíes continuaron en Rafah, atacando el centro, el este y el oeste del enclave. El comandante del Comando Sur del Ejército, Yaron Finkelman, afirmó que los soldados seguirán avanzando hasta lograr todos sus objetivos. Este sábado, los equipos de rescate retiraron 9 cadáveres de entre los escombros de viviendas bombardeadas en Rafah, que fueron trasladados al hospital de Khan Yunis.
Ante el avance de las tropas, alrededor de un millón de personas han huido de Rafah hacia otras zonas del sur y centro de Gaza, incluidas las playas de Al Mawasi, el campo de refugiados de Deir al Balah y el vecino Khan Yunis. A pesar de las designaciones de Israel como “zonas seguras”, las organizaciones humanitarias rechazan estas zonas debido a los peligros persistentes.
La crisis humanitaria en Gaza empeora. El Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) anunció la retirada del dique flotante en Gaza, que facilitaba la entrada de ayuda humanitaria, debido a las mareas altas previstas. Días antes, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) anunció el cese de su actividad en el muelle por motivos de seguridad, ya que el Ejército israelí utilizó sus alrededores para preparar una operación en Nuseirat.
Con continuas restricciones al acceso humanitario, el pueblo de Gaza enfrenta niveles desesperados de hambre. Más de 50.000 niños necesitan tratamiento por desnutrición aguda. La agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) informó en X de la muerte de un niño por desnutrición, elevando a 40 el número de víctimas mortales por hambre en Gaza. Desde el inicio de la guerra, casi 37.300 personas han muerto en la región.
