La historia de Fórmula 1 Tiene muchos capítulos oscuros en los que pilotos, aficionados, mecánicos… han perdido la vida. Accidentes que han ayudado a mejorar la seguridad en coches y circuitos. Sobre todo, un gran premio encabeza la historia negra de la F1 reciente: la de San Marino 1994.
El austriaco Roland Ratzenberger y el brasileño Ayrton Senna perdieron la vida en sendos accidentes durante el Gran Premio celebrado en Imola. A ambos incidentes hay que sumar otro gravísimo impacto sufrido por Rubens Barrichello durante los entrenamientos libres.
En Indianápolis 1953, 1955 y 1959, Alemania 1954 o Bélgica 1960, dos pilotos de Fórmula 1 murieron durante el fin de semana de carreras. Pero en Imola 1994 no sólo murieron dos pilotos y otro resultó herido, la F1 se despidió de una leyenda que, al margen de sus hitos deportivos y su fama mundial, llevaba años luchando por mejorar la seguridad de la competición.
Ayrton Senna al volante del McLaren
Senna, un semidiós
A los 34 años, Ayrton Senna falleció tras conquistar tres títulos mundiales de Fórmula 1, 41 victorias (6 de ellas en el histórico trazado de Mónaco), 80 podios, 65 poles en un total de 165 Grandes Premios disputados a lo largo de 11 temporadas. . A pesar de estar lejos de las cifras de fangio, Schumacher, hamilton o el actual dominador de la competición Max VerstappenSenna es considerado por muchos el mejor piloto de la historia.
Para comprender el fenómeno hay que ver a Senna más allá de las cifras y más allá de las pistas. Sus récords, superados hoy, habrían sido mucho mejores si su carrera no se hubiera visto truncada en aquel accidente de Imola, pero lo que nadie ha conseguido igualar ha sido el fenómeno fanático y la adoración que lo rodea, el respeto por parte de sus rivales (incluso su mayor enemigo en la pista: Alain Prost, rendido ante su leyenda y acompañó su féretro durante su funeral).
Su fe en Dios es uno de los aspectos claves para definir a Senna. Era un cristiano ferviente y practicante y leía la Biblia con frecuencia. Una de sus experiencias más místicas fue en su querido Gran Premio de Mónaco en 1988.
El brasileño logró la pole con un tiempo de 1:23:998; 1,4 segundos más rápido que Prost, la mayor diferencia entre los dos primeros en una clasificación de Fórmula 1. En esa sesión, Senna pareció volar sobre las calles del Principado y después reconoció cómo había conducido.
“Recuerdo que corría cada vez más rápido en cada vuelta. Ya había conseguido la pole por unas décimas, luego por medio segundo, luego por casi un segundo y, al final, por más de un segundo. En ese momento de repente me di cuenta de que estaba traspasando los límites de la conciencia”.
En ese momento de repente me di cuenta de que estaba traspasando los límites de la conciencia.
Ayrton Senna, tras su pole en el GP de Mónaco de 1988
“Tenía la sensación de estar en un túnel… El circuito, para mí, era sólo un túnel. En ese momento me sentí vulnerable. Había establecido mis propios límites y los del coche, límites que nunca había alcanzado. Todavía tenía el control, pero no estaba seguro de qué estaba pasando exactamente: estaba corriendo y corriendo”, explicó Ayrton.
“Fue una experiencia horrible. De repente me di cuenta de que era demasiado. Caminé lentamente hacia boxes y me dije que no volvería a la pista ese día. Fue una experiencia que nunca se había repetido con tanta intensidad y deliberadamente no me permití llegar tan lejos otra vez”, dijo Senna.
Tras esa clasificación, Senna dominó la carrera. Hizo la vuelta más rápida de la carrera con un tiempo de 1:26.321 en la vuelta 59 pero el brasileño quería más y siguió apretando el ritmo hasta que en la vuelta 66 chocó contra las barreras de la curva antes de entrar al túnel. .
Tenía un camino hacia Dios y otro hacia el diablo. El accidente fue sólo una señal.
Ayrton Senna, tras el GP de Mónaco de 1988
“Eso no fue sólo un error de conducción. Fue el resultado de una lucha interna que me paralizó y me hizo invulnerable. Tenía un camino hacia Dios y otro hacia el diablo. El accidente fue sólo una señal de que Dios estaba ahí esperándome. estrecharme la mano”, dijo Ayrton.
La carrera la acabó ganando Alain Prost, aunque tras ese abandono serían siete victorias y dos segundos puestos que acabarían dándole el título de pilotos.
Ayrton Senna, con el mono de McLaren
David Vicente
Causas del accidente
Debido a la importancia de Senna, el accidente ha sido investigado mil veces. En esos años los coches ya contaban con una gran cantidad de variables almacenadas en tiempo real sobre el estado de cada parte del coche. Los inicios de la telemetría ayudaron mucho a entender cómo fue el accidente que provocó la muerte del piloto brasileño.
Ayrton murió, según los médicos, cuatro horas después del accidente en Tamburello y cuando ya se encontraba en el hospital, pero los médicos que lo atendieron en la pista explican que perdió el conocimiento mientras estaba siendo atendido.
La cronología de los acontecimientos comienza al inicio de la carrera. El coche del finlandés Jyrki Jarvilehto Lehto se quedó quieto en la quinta posición de la parrilla y el portugués Pedro Lamy a bordo de un Lotus no pudo evitarlo, chocando fuertemente contra él. Por segunda vez en la historia de la Fórmula 1, el coche de seguridad salió a pista y sujetó los monoplazas mientras se recogían los restos de los monoplazas accidentados.
Senna y Schumacher detrás del coche de seguridad en el GP de F1 de San Marino de 1994
David Vicente
La carrera se reanudó en la sexta vuelta con Senna a la cabeza seguido de cerca por Michael Schumacher. La falta de ritmo durante el coche de seguridad provocó un enfriamiento masivo de los neumáticos. En el vídeo de la carrera se puede ver cómo el coche de Senna rozaba la parte inferior del coche con la pista en muchas zonas del circuito.
El motivo, el enfriamiento de los neumáticos produce una compresión del caucho que se traduce en una reducción de su tamaño. Esto rebaja la altura del coche, provocando que el suelo, ya de por sí bajo por la búsqueda del ‘efecto suelo’, acabe rozando el asfalto.
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En la vuelta siete, Senna había conseguido alejarse un poco de Schumacher y al completar la gran curva de izquierdas denominada Tamburello (dentro del primer sector), el Williams FW16 se fue recto, chocando contra las protecciones exteriores de la pista.
El coche quedó destruido. Los alerones delantero y trasero volaron, la zona del morro quedó completamente comprimida y el neumático delantero derecho se desprendió del chasis, al igual que el trasero. Senna permaneció inmóvil dentro del auto. Los comisarios inmediatamente levantaron la bandera roja y se detuvo la carrera.
El Williams FW16 de Ayrton Senna tras el accidente de Imola
David Vicente
Dado que hubo una muerte, la ley italiana exigió una investigación sobre las causas que provocaron el accidente. Aunque se han realizado muchas investigaciones, ninguna teoría ha explicado todos los detalles que provocaron el impacto.
Que los neumáticos estuvieran fríos y provocaran que el suelo del coche entrara en contacto con el asfalto, haciendo que desapareciera el efecto suelo que sujeta los coches al suelo, sobre todo en las curvas, fue una de las causas, pero ¿era la única?
Tras analizar los restos del coche se pudo comprobar que la columna de dirección estaba rota. Este elemento había sido reparado de forma no muy exhaustiva antes de la carrera ya que Senna pedía más distancia. Los datos demuestran que hasta el momento del accidente, Ayrton pisó el pedal del freno e intentó girar para compensar la pérdida de dirección.
Los azafatos atienden a Ayrton Senna tras el accidente
David Vicente
Es imposible saber si la columna de dirección se rompió en ese momento o después del impacto. En cualquier caso, a más de 200 km/h, incluso con una buena dirección, a Ayrton le habría resultado difícil controlar el coche. Además, otras teorías indican que uno de los neumáticos de Senna podría pincharse por haber pisado algunos restos del coche (del accidente de la primera vuelta) en la línea de meta.
Después de intuir qué pudo provocar el accidente, ¿qué provocó la muerte de Ayrton Senna? La respuesta a esta otra pregunta es mucho más unánime. Una de las llantas que se desprendió del auto habría golpeado la cabeza del conductor.
A pesar de todos los problemas, un posible pinchazo, la mala reparación de la columna de dirección y el fallo en el efecto suelo, si el neumático suelto se hubiera desviado unos centímetros, Senna habría salido casi ileso del accidente.
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consecuencias de la muerte
Después del Gran Premio de San Marino, la FIA y la Fórmula 1 aprendieron mucho sobre seguridad. Costó dos vidas y un terrible accidente en Barrichello. Desde aquel fin de semana negro y hasta el 6 de octubre de 2014 en Japón, la F1 no volvió a ver morir a un piloto por accidente en un Gran Premio.
La muerte de Jules Bianchi En el diluvio de Suzuka también impulsó nuevas medidas de seguridad en los coches y procedimientos de actuación durante la carrera. El piloto francés murió al chocar contra una excavadora que intentaba retirar un coche varado en la puzolana.
Accidente de Guanyu Zhou en Silverstone
Reuters
La llegada del Halo ha supuesto protección para los conductores ante atropellos por otros coches, vuelcos o neumáticos que salen volando, como en el caso de Senna. el accidente de Guanyu Zhou en Silverstone 2022 es un ejemplo de la seguridad que tienen los monoplazas hoy en día. Accidentes como el de Senna o Bianchi serían meras anécdotas si ocurrieran con las medidas de seguridad actuales.
