Está cada vez más cerca la primera perforación en busca de petróleo y gas en la Cuenca Norte del Mar Argentino, confirmó a elDiarioAR fuente directa del proyecto a cargo de la empresa noruega Equinor. La fecha de inicio de las perforaciones aún no está definida, aclaró. La semana pasada, las organizaciones Greenpeace y la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas alertaron sobre la inminente llegada del buque perforador Valaris 17, que se dirige a la ciudad de Mar del Plata.
La perforación tiene objetivo determinar la existencia de hidrocarburos en el pozo Argerich-1A unos 350 kilómetros de la costa bonaerense.
Las organizaciones señalaron que las perforaciones se realizarán en un zona clave para la cría y reproducción de especies en el espacio marítimo denominado talud continental. El pasado 4 de abril, ambas entidades realizaron una nueva presentación ante el juzgado federal número 2 de Mar del Plata para solicitar a la Justicia reconsiderar dictar una medida cautelar que ya fue rechazada en diciembre pasado y que busca frenar las perforaciones exploratorias en esta época del año.
La perforación exploratoria del pozo Argerich-1 sería la primera operación realizada en aguas ultraprofundas del Mar Argentino. Las organizaciones sostuvieron en un comunicado que “estas empresas –por Equinor y sus socios YPF y Shell van a ciegas a perforar el fondo marino del talud continental”. “Existe un desconocimiento sobre la biodiversidad que habita en el fondo marino a perforar y, por tanto, incertidumbre sobre los efectos que la actividad puede generar hacia dicha fauna y flora”, advirtieron.
Ambas entidades afirman que existen “inconsistencias y reconocimientos expresos de la ausencia de información fundamental para el procedimiento” y que “muchas de ellas surgen de los documentos presentados por Equinor, YPF y el Estado Nacional”.
En respuesta a la consulta de elDiarioAREquinor, a cargo de la perforación, no hizo comentarios.
bombardeo acústico
La perforación exploratoria se produce después de que Equinor haya llevado a cabo prospecciones sísmicas o bombardeos acústicos para determinar las áreas donde se podrían encontrar gas y petróleo.
Durante el último trimestre de 2023, Equinor llevó a cabo esta operación con un barco especialmente equipado con cañones de aire comprimido, que generan ruido a través de explosiones (entre 240 y 260 db) que provocan impactos en más de 300 mil kilómetros cuadrados, una superficie equivalente a la Provincia de Buenos Aires. Los expertos de Greenpeace detallaron que algunos de estos sonidos son audibles a cientos de kilómetros de distancia.
El ruido generado por la explosión de un solo cañón es comparable al generado por el lanzamiento de un cohete o una explosión de dinamita submarina.. Estos ruidos atraviesan el océano y llegan hasta las profundidades del fondo marino. Así, altera todo lo que vive en el mar argentino, desde las diferentes especies de mamíferos marinos, como la ballena franca austral -Monumento Natural de Argentina-, delfines y tortugas hasta peces e invertebrados.
ED/JJD