SAN ANTONIO – Un hombre de Houston acusado de asesinato en San Antonio alega defensa propia, pero un testigo contradijo esa afirmación en el juicio del jueves.
Tavares Anderson ha estado siendo juzgado toda la semana por el asesinato de Malcolm Ray Everett, de 26 años.
Everett recibió un disparo fatal afuera del departamento de su primo en el lado noroeste el 18 de julio de 2021.
En el testimonio, la prima de Everett, Terika Henderson, dijo que estaba saliendo casualmente con Anderson y que él estaba en la ciudad visitándola.
Después de que todos salieron a beber, Henderson dijo que Anderson estaba haciendo comentarios inapropiados y cuando ella le pidió que se fuera, él se enfureció.
Henderson dijo que su discusión se extendió hasta el estacionamiento cuando ella intentó tomar sus cosas. Ella dijo que luego Everett se acercó y le pidió a Anderson que se fuera también.
“Nunca le puso las manos encima”, dijo Henderson. “Él no tenía armas encima”.
Ella dijo que Anderson sacó su pistola y, antes de que ella se diera cuenta, disparó.
“Pensé que me había disparado porque estaba muy cerca de él, pero luego me di la vuelta y me di cuenta de que los ojos de Ray parpadeaban, pero él todavía estaba de pie”, dijo Henderson. “Y entonces fue cuando me di cuenta de que él era el que había sido golpeado”.
Everett recibió un impacto en el pecho a quemarropa. La bala le atravesó el corazón y la aorta, provocando su muerte, dijo el médico forense durante el testimonio.
La defensa dijo en sus declaraciones iniciales el martes que Henderson y Everett fueron los agresores, y Anderson temía que Everett fuera a atacarlo.
El jurado decidirá qué lado de la historia creen. Las deliberaciones podrían tener lugar tan pronto como el viernes.
Si es declarado culpable, Anderson enfrenta cadena perpetua.
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