La constante evolución en el campo de la cirugía oncológica ha propiciado la introducción y mejora de técnicas mínimamente invasivas, entre las que destaca la cirugía toracoscópica, también conocida como VATS (Videotoracoscopia asistida). Este innovador procedimiento se ha convertido en un pilar fundamental en el tratamiento de los tumores de pulmón, permitiendo una intervención quirúrgica más precisa y menos invasiva.
Introducción a la Cirugía Toracoscópica (VATS)
“La cirugía toracoscópica es una técnica quirúrgica que utiliza pequeñas incisiones y un dispositivo de visualización llamado toracoscopio para acceder al tórax. En el contexto de los tumores de pulmón, la VATS se ha consolidado como una alternativa eficaz a la cirugía tradicional a tórax abierto”, afirma el Dr. César Díaz Selles, cirujano oncólogo del Hospital Paitilla. Este tipo de trámite se puede realizar en casos como los siguientes:
● Extirpación de tejido para diagnosticar diversos tipos de patologías, incluido el cáncer de pulmón y el mesotelioma pleural, un tipo de cáncer que afecta el tejido que rodea los pulmones.
● Intervención quirúrgica pulmonar, utilizada tanto en el tratamiento del cáncer de pulmón como en la reducción del volumen pulmonar.
● Procedimientos para drenar el exceso de líquido o aire en la región circundante de los pulmones.
● Reparación de hernia de hiato, que ocurre cuando la porción superior del estómago se mueve hacia el pecho a través de un orificio en el diafragma.
● Corrección del neumotórax espontáneo primario (fuga de aire en el espacio entre los pulmones y la pared torácica).
● Necesidad de realizar una biopsia del parénquima pulmonar (zona de los alvéolos, donde se produce el intercambio de gases en los pulmones).
Precisión quirúrgica: la clave del éxito de VATS
La cirugía toracoscópica ha transformado el abordaje de los tumores de pulmón. En este contexto, la precisión es la piedra angular del éxito de VATS, marcando una nueva era en el tratamiento de patologías pulmonares. Esta técnica revolucionaria ha perfeccionado la precisión quirúrgica y ofrece resultados excepcionales.
1. Visualización detallada: rayos X en tiempo real
La herramienta fundamental de VATS es el toracoscopio; Este dispositivo ofrece una radiografía en tiempo real del interior del tórax, lo que permite una visualización detallada de la ubicación y extensión del tumor pulmonar. La capacidad de observar con detalle se traduce directamente en una mayor precisión en la extirpación del tejido afectado.
2. Mínima invasión, máxima precisión
La naturaleza mínimamente invasiva de VATS contribuye significativamente a la precisión quirúrgica. Las pequeñas incisiones (que requieren menos uso de analgésicos) reducen la manipulación de los tejidos sanos circundantes necesarios para la función pulmonar posoperatoria, minimizando el riesgo de daño colateral.
3. Menor riesgo de complicaciones: un marcador de precisión
Esta técnica reduce la probabilidad de infecciones, sangrado y otros eventos adversos postoperatorios. Los resultados clínicos demuestran consistentemente una tasa de complicaciones más baja en comparación con la cirugía a tórax abierto.
4. Recuperación acelerada: un indicador de eficacia
La precisión de la VATS también se refleja en el período de recuperación, que es más rápido, con una estancia hospitalaria más corta y menos molestias en comparación con la cirugía convencional y una rehabilitación más eficiente que permite a los pacientes regresar rápidamente a sus actividades diarias. .
Tumores de pulmón y VATS
“La aplicación de VATS en el tratamiento de tumores de pulmón ha demostrado ser exitosa en diversos casos. Desde la extirpación de nódulos pulmonares hasta la resección de tumores más extensos, esta técnica ha demostrado su versatilidad y eficacia, consolidándose como una opción preferida en el manejo quirúrgico de los tumores pulmonares, manteniendo una mejora constante en técnicas e instrumentos”, concluyó el Dr. . Díaz Selles, cirujano oncológico del Hospital Paitilla.
Fuente. Hospital Paitilla
