Toda una trama de engaño y complicidad ha quedado al descubierto en la Clínica de la Policía de Barranquilla, con la reciente captura de un falso médico que operó con nombre y título inventados durante más de dos años en el centro asistencial. La sorpresa cundió aún más cuando se reveló que entre los detenidos se encontraban dos policías, involucrados en el caso.
La mujer, que se hacía llamar Maira Alejandra Zapata, logró infiltrarse en la institución, atendiendo pacientes, recetando medicamentos y hasta atendiendo situaciones de emergencia, todo bajo una identidad falsa. Nadie sospechaba de su verdadera identidad hasta que un descuido en el baño de una clínica reveló su engaño: una identificación con su foto, pero con otro nombre.
Pese a las advertencias que surgieron posteriormente sobre la presencia del supuesto médico, ella optó por desaparecer, mientras que los responsables de su contratación, que revisaron su documentación y aprobaron su contrato, fueron detenidos cuando su error se convirtió en delito.
La investigación, originada a partir de denuncias y llevada a cabo por la Fiscalía General de la Nación y la Fiscalía, culminó con las recientes detenciones. La falsa médica, que había logrado pasar desapercibida, fue uno de los objetivos de las detenciones, junto a quienes, de alguna manera, facilitaron su ingreso y estadía en la clínica.
Los problemas internos entre los funcionarios de la clínica fueron claves para sacar a la luz esta farsa, así como irregularidades administrativas que llamaron la atención de los encargados de combatir la corrupción. La falta de registro del “Dr. Maira” en el Registro Único Nacional de Talento Humano en Salud, Rethus, fue uno de los puntos que generó sospechas y generó investigaciones.
Al final, las acciones previstas por la Policía dieron sus frutos con las detenciones realizadas, poniendo fin a una historia de engaños que afectó tanto a pacientes como a profesionales médicos de la institución policial.
identificación: 57
