La especialidad de Medicina Familiar se inició en 1978 y desde entonces Han pasado pues 46 años. Parece increíble que compañeros de otras especialidades aún no se hayan enterado de que existe la especialidad de Medicina Familiar. Una especialidad cuya carga formativa ha ido aumentando con el tiempo, pasando de tres a cuatro años de formación. Esto se debe a la relevancia de la tarea del médico de familia y a la complejidad que implica nuestra especialidad. Y para entenderlo mejor voy a referirme a una fábula como la del doctor y el elefante, pero antes me gustaría añadir un dato de especial interés: “Si mantienes a tu médico de familia un mínimo de 15 años, tu mortalidad disminuye entre un 25 y un 30%”. Un lujo que no suele aparecer en las noticias, pero que tiene un impacto mayor que cualquier otra actuación médica en la salud de nuestros pacientes.
Ahora les voy a contar la metáfora del doctor y el elefante:
Cuentan que un día varios sabios hindúes se reunieron para definir cómo era un elefante y después de arduas discusiones no pudieron ponerse de acuerdo, por lo que Decidieron salir al bosque y aprender cómo era un elefante.; Cuando finalmente lo encontraron, cada uno lo tocó en un lugar diferente; El primero lo tocó contra su cuerpo y le quedó claro que un elefante era como un enorme muro, el segundo lo agarró por el colmillo y no le quedó duda de que un elefante era como una enorme lanza puntiaguda; El tercero tocó su trompa y tuvo muy claro lo que realmente era un elefante: era como una enorme serpiente que se movía en todas direcciones; El cuarto tocó una oreja y dedujo que el elefante era como un enorme abanico por el aire que generaba al moverse y finalmente el último, agarrándose de una pata, dedujo que un elefante era como una enorme columna.
Un hombrecito a lomos del elefante les dijo que estaban bien.
Reunidos nuevamente, las discusiones aumentaron las dudas y desacuerdos, hasta que Un hombrecito a lomos del elefante les dijo que estaban bien. en parte, pero ninguno lo tuvo en su totalidad ya que analizaron al elefante de forma equivocada.
Nunca pierdas la perspectiva que ese individuo necesita.
La Medicina Familiar es el hombrecito, mantiene la visión global. sin el cual es imposible un enfoque biopsicosocial y, por tanto, integral e integrador del paciente. El médico de familia necesita el apoyo de todas las especialidades para profundizar en aspectos específicos del paciente, pero nunca pierde la perspectiva que este individuo necesita para la recuperación o preservación de su salud.
Los medios de comunicación continúan destacando intervenciones complejas e importantes para un individuo, pero Casi nunca transmiten la importancia de la Atención Primaria de la salud como un elemento verdaderamente transformador y preservador de la salud a pesar de la evidencia y contundencia de los datos epidemiológicos que así lo demuestran.
Si se pierde el potencial de la Medicina Familiar, también lo perderán otras especialidades hospitalarias.
Es por eso que Si se pierde el potencial de la Medicina Familiar, también lo perderán las demás especialidades hospitalarias. parte de su significado ya que solo verán el colmillo del paciente y no el elefante completo.
