Una nueva modalidad de estafa Vinculado al turismo llegó a Mendoza y genera preocupación. Esta es la compañía “Vacaciones“, Dedicado a ofrecer alojamientos de tiempo compartido en Pinamar. Esta compañía acumula quejas en varias provincias por sus acciones fraudulentas.
La compañía utiliza agentes que capturan clientes en lugares ocupados que los invitan a participar en encuestas o sorteos aparentemente gratuitos. Luego, las víctimas reciben una llamada en la que se informó que ganaron una estadía en Pinamaren uno de los tres complejos que posee la compañía.
Es entonces cuando el supuesto “ganador” del sorteo se convoca en un hotel central con la promesa de entregar un cupón para disfrutar de su premio. Sin embargo, es en ese momento que los vendedores de la compañía lo hacen firmar un contrato poco claro desde el cual terminan sufriendo cargos mensuales no autorizados en su tarjeta de crédito.
Según varios testimonios, los contratos presentados son confusos y cuando las víctimas intentan cancelarlos, la compañía retrasa las respuestas o las ignora directamente.
En la provincia de Chaco, por ejemplo, las autoridades ya han sancionado “vacantes” después de detectar empleados no registrados y falta de calificaciones para operar. Un grupo de clientes de desacuerdo incluso creó un grupo en Facebook para compartir experiencias y alertar sobre estas prácticas. Algo similar sucedió en la provincia de Corrientes.
Los testimonios recopilados están de acuerdo en que la empresa promete estadías económicas o libres, pero luego agrega cargos imprevistos. Una víctima denunció una colección sorpresa para gastos para una estadía en PinamarNunca se mencionó durante la contratación.
Las autoridades de defensa del consumidor recomiendan que Mendoza tome precauciones a estas competiciones que terminan siendo Estafa encubierto. Sugieren verificar la autorización de las empresas y leer los contratos cuidadosamente antes de firmar cualquier compromiso.
Esta modalidad de estafa Eso llegó a Mendoza incluye la absorción de las encuestas callejeras que terminan con invitaciones a “conversaciones informativas” de una hora. Estas presentaciones generalmente se extienden y concluyen con la firma de contratos difíciles de rescindir.
Los especialistas aconsejan desconfiar de cuándo una empresa evita que el contrato lo analice o cuándo presione para firmar en ese momento. Se pueden presentar quejas en las oficinas de defensa del consumidor.