Luego de cinco rondas consecutivas de caídas, los activos argentinos tomaron un respiro y recuperaron parte del terreno perdido durante la semana. Si bien no fue suficiente para revertir el aumento del riesgo país que Comenzó la semana justo por encima de los 1.300 puntos básicos para cerrarla alrededor de los 1.600.La recuperación de la jornada puso freno a una serie de caídas que empezaban a encender las alertas en los mercados. En ese sentido, calmó el debate sobre si la caída acumulada del 9% en los bonos que cotizan en Wall Street, por ejemplo, era una simple corrección después de haber subido más del 40% en el año o si lo que estaba sucediendo era un cambio de ciclo. La respuesta aún no está clara, pero la mejora actual disipa al menos temporalmente las peores especulaciones.
Sin embargo, durante la semana los títulos de deuda cotizados en el exterior acumularon una caída promedio del 9% mientras que los locales lo hicieron entre 3% y 5%, contemplando incrementos promedio del 2% durante la rueda de hoy.
El mal tiempo apareció primero en el mercado cambiario, con la suba del dólar apenas el Banco Central apuró una profunda baja de la tasa de interés, pero en las semanas siguientes se extendió al resto de los activos por las nuevas complicaciones que surgió en el frente. político a la hora de avanzar con las reformas económicas.
“Si el Gobierno logra superar los obstáculos legislativos y logra la aprobación de la Ley de BasesSe aclara la situación con el Banco de China y el Directorio del FMI (Fondo Monetario Internacional) aprueba el desembolso, podríamos observar una recomposición de expectativas que detiene la sangría en los títulos locales”, dijo Portfolio Personal Inversiones.
Resumió así las principales preocupaciones que existen hoy en el mercado. Uno de ellos es que, en las próximas semanas, Argentina deberá renegociar o reintegrar casi USD 5.000 millones a China por un cambio de moneda que negoció el Gobierno anterior, mientras que se espera que el FMI apruebe un desembolso de unos USD 800 millones. tras un acuerdo sobre la octava revisión del programa actual.
En ese marco, el índice accionario líder S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires también tomó algo de oxígeno y avanzó un ligero 0,5% tras desplomarse un 9,37% en las tres sesiones anteriores. “Dado que todavía estamos esperando señales más convincentes para pensar en una normalización macro sostenible, creemos que debe prevalecer la cautela en términos de inversión”, afirmó el Grupo SBS, mientras que la consultora AdCap Securities aseguró que “los precios de los bonos” moverse en el futuro en torno al avance de la fórmula previsional en Diputados que impulsa la oposición y que podría complicar el equilibrio fiscal”. Este proyecto para sancionar una nueva fórmula de movilidad previsional en la Cámara de Diputados, que aún debe ser aprobada por el Senado y rechazada por el Gobierno, fue uno de los ejes claves del mal humor en el mercado.
En cuanto al mercado cambiario, el Banco Central tuvo que vender USD 27 millones en la última rueda de la semana, lo que reveló la mayor dificultad para comprar divisas a pesar de atravesar una temporada de cosecha en la que el ritmo de liquidación es más lento de lo esperado. Los dólares financieros, en tanto, operaron sin mayores sobresaltos y se mantuvieron en $1.306 el contado con liquidación y $1.282 el dólar bursátil. El dólar informal, en tanto, recuperó los $15 perdidos ayer y volvió a cotizar a $1.265 al cierre.
”En un contexto de tasas nominales más bajas, la caída en los flujos de liquidación de exportaciones estuvo detrás del aumento del CCL, aunque en términos reales aún está por debajo de los niveles observados en los últimos cuatro años”, dijo el Grupo SBS.
