El panqueque volador más raro – .

El concepto tradicional de avión se asocia comúnmente con un diseño estandarizado: un fuselaje central, un par de alas, dos motores y un timón.

Sin embargo, en el ámbito militar, los diseños aeronáuticos suelen romper con este molde convencional, adaptándose a las demandas y funcionalidades específicas requeridas para las operaciones de combate y defensa.

Desafiando la convencionalidad: aviones militares a través de la historia

Durante la Segunda Guerra Mundial, la industria de la aviación enfrentó desafíos sin precedentes, catalizando la innovación en el diseño de aviones militares para vencer a las potencias enemigas. Esta era de intensa presión y necesidad estratégica fomentó el desarrollo de aviones con características poco ortodoxas y capacidades mejoradas.

Por ejemplo, el alemán Horten Ho 229 se destacó como un innovador caza de alas múltiples propulsado por jet, diseñado para brindar eficiencia y sigilo. En contraste, el británico Hafner Rotabuggy, a menudo descrito como un jeep volador, ilustra la audaz experimentación de la época en la creación de vehículos híbridos para múltiples usos.

Vought V-173

La Segunda Guerra Mundial marcó un antes y un después en el ámbito de los avances tecnológicos militares. Se aceleró la investigación en tecnologías de cohetes y turborreactores, al igual que el desarrollo de nuevos formatos de alas y estructuras de aviones. Entre estos inventos, el Vought V-173, apodado el “panqueque volador”, destaca por su diseño extremadamente inusual, demostrando la audacia y creatividad de los ingenieros de la época en busca de la superioridad aérea.

Cada uno de estos acontecimientos refleja un período de intensa creatividad y adaptabilidad, lo que subraya cómo las necesidades de la guerra pueden impulsar innovaciones que se desvían significativamente de las normas aceptadas.

Innovaciones en diseño aeronáutico: El V-173

Si observamos el V-173, su diseño destaca por ser extraordinariamente poco convencional. Este avión fue diseñado con un fuselaje en forma de disco que también funcionaba como superficie de sustentación, característica de su ala completa. Entre sus elementos distintivos destacan:

  • Dos hélices de madera con un diámetro de 5 metros (16,5 pies)
  • Un ángulo hacia arriba de 22 grados.

Este ángulo era crucial para acomodar las extensas palas de sus motores de hélice. Charles Zimmerman, ingeniero aeronáutico del Comité Asesor Nacional de Aeronáutica, predecesor de la actual NASA, fue el cerebro detrás de este peculiar diseño. Zimmerman buscó crear un avión que:

  • Podría permanecer casi estacionario o moverse a bajas velocidades.
  • Superará las velocidades de los aviones convencionales.
  • Contará con grandes hélices y potentes motores.

Sin embargo, el diseño nunca logró el objetivo de integrar motores lo suficientemente potentes como para permitir que el “panqueque volador” alcanzara altas velocidades.

La lógica detrás del diseño no convencional en aeronáutica militar

Tres marines estadounidenses mueren en accidente de avión OspreyTres marines estadounidenses mueren en accidente de avión Osprey
Archivo: Se ve un MV-22B Osprey aterrizando en el USS America cerca de la costa de Brisbane, Australia, el 20 de junio de 2023. (Darren England/AAP Imagen vía AP)

Cabría preguntarse si sería práctico desarrollar un avión con características tan inusuales. Según Al Bowers, ex científico jefe del Centro de Investigación de Vuelo Armstrong de la NASA, las enormes hélices del V-173, que giraban a velocidades relativamente bajas, generaban importantes fuerzas giroscópicas. Esta fuerza giroscópica permitió que el V-173 se comportara de manera similar a un helicóptero o al V-22 Osprey, proporcionando familiaridad operativa a los pilotos del V-22.

Gracias a su estructura única, el V-173 podía ejecutar despegues rápidos y estables con vientos en contra de hasta 30 mph (48 km/h). Su capacidad para operar en espacios reducidos lo hacía ideal para despliegues desde barcos, una ventaja táctica crucial para la Armada de los Estados Unidos durante la guerra en el Pacífico.

La búsqueda de aviones con capacidades operativas desde diversas plataformas marinas era una prioridad para la Armada, que necesitaba garantizar la superioridad aérea en un teatro de operaciones expansivo y desafiante.

Al 18 de julio de 2023, la Armada de los Estados Unidos tenía 4.012 aviones clasificados como operativos, lo que demuestra la evolución continua y la importancia estratégica de adaptar y mejorar el diseño de los aviones para satisfacer las demandas de los conflictos modernos.

Transición del concepto “Flying Pancake” al desarrollo industrial

Vought V-173

Después de presentar su innovador diseño a la entidad que eventualmente se convertiría en la NASA, Charles Zimmerman decidió llevar su concepto de “panqueque volador” al ámbito privado. Esta oportunidad surgió cuando el presidente de la División Vought Aircraft de United extendió una invitación a Zimmerman para unirse a la corporación.

Este fue un movimiento audaz por parte de Zimmerman, dado que Vought era conocido por su enfoque conservador en el desarrollo de aviones. Sin embargo, el diseño del “panqueque volador” logró captar la atención y el interés de sus nuevos superiores, quienes decidieron construir y probar un modelo de un cuarto de escala basado en las especificaciones de Zimmerman. Finalmente, este interés culminó en un contrato emitido por la Armada de los Estados Unidos el 4 de mayo de 1940, lo que marcó un hito en la trayectoria del proyecto.

El V-173 rápidamente se ganó la estima de los pilotos de la Armada de los Estados Unidos. Después de acumular 131 horas de vuelo, los pilotos brindaron comentarios favorables sobre la aeronave, señalando que, aunque requirió ajustes en las respuestas de control en comparación con aviones más tradicionales, el V-173 ofrecía capacidades únicas.

Un ejemplo notable de esto fue su capacidad para permanecer casi estacionario en el aire. Boone Guyton, piloto experimental jefe de Vought, comentó sobre esta característica distintiva: “Pude aplicar toda la potencia, levantar el morro lo más alto posible y tener control de los tres ejes sin detenerme”.

Finalización del proyecto “Flying Pancake”

Vought V-173

A pesar de las evaluaciones positivas, el proyecto “panqueque volador” enfrentó importantes obstáculos que llevaron a su cancelación. Con el advenimiento de la era de los motores turborreactores, la Marina de los EE. UU. decidió desviar sus recursos hacia tecnologías más avanzadas y contemporáneas.

Además, en 1946, el proyecto no sólo había superado considerablemente el presupuesto inicial, sino que también había superado el tiempo de desarrollo previsto. En consecuencia, el 17 de marzo de 1946, la Armada suspendió oficialmente el proyecto V-173, marcando el final de una era experimental en el diseño de aviones militares.

 
For Latest Updates Follow us on Google News
 

PREV BONK sube un 50% y supera a FLOKI en capitalización de mercado, pero persisten obstáculos clave
NEXT Los niños y adultos en Estados Unidos están consumiendo suplementos, pero ¿conocen los riesgos? – .