La generación distribuida del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) durante el verano se orientará en dos direcciones: contribuir a mantener los niveles más bajos posibles de afectación en el servicio diario y operar en circunstancias de tormentas tropicales, según dijo su director, Arles Luna Leiva. , le dijo a Granma.
Entre los 560 grupos diésel y los 400 de fueloil, precisó que la entrega prevista para julio y agosto alcanza la cifra de 845 megavatios (MW), reservados principalmente para el horario nocturno, como continuidad de una estrategia puesta en práctica por la Unión Eléctrica (UNE).
Destacan averías repetitivas en varios lugares del país y, como respuesta, mantenimientos cíclicos de hasta tres días y capitales prolongados entre diez y 15, con el objetivo de evitar daños masivos.
Sin embargo, la disponibilidad de recursos para el verano disminuyó respecto a los anteriores, como lo ilustran las 163 máquinas diésel que quedaron desactualizadas en cuanto a sus ciclos de mantenimiento, afirmó Luna Leiva.
Las principales intervenciones en las faenas diésel consisten en el cambio de filtros de aceite, en el generador, en el panel y en la calibración de los motores, detalló. Mientras tanto, los de combustible reciben las principales intervenciones en los sistemas de inyección y cámaras de combustión.
En cuanto a la operación en condiciones de tormenta tropical, la generación distribuida, detalló, priorizará la vitalidad de los servicios locales como centros de salud, abastecimiento de agua y otros de gran importancia para la población.
Estos eventos climáticos afectan las líneas de transmisión, y los grupos electrógenos crean sistemas o microsistemas aislados para mantener un nivel mínimo imprescindible de dichas actividades, explicó el directivo.
