Síndrome del miembro fantasma – .

Se llama síndrome del miembro fantasma y consiste en los síntomas que algunas personas experimentan en un miembro que ha sido amputado. Y esa sensación es la que sufre la afición de la UD Logroñés desde el 18 de julio 2020, cuando el equipo ascendió a Segunda División. Un ascenso sordo, en silencio. Sin público en las gradas, con el dilema de contener una celebración histórica por respeto al dolor global causado por la covid, y castigados a esconder sus sonrisas tras malditas mascarillas, la afición rojiblanca sufre desde entonces el síndrome del miembro fantasma.

Aquella temporada en Segunda División, con la afición pegada a la tele y al transistor, es una cicatriz que aún no termina de cicatrizar. Una temporada amputada por un sentimiento que necesita, que necesita ser compartido con urgencia.

Porque, al fin y al cabo, ¿qué es el fútbol si no lo vives, lo sufres y lo disfrutas con los tuyos? No hay expresión más emocionante que celebrar el éxito de tu equipo. Fuera ascensores sociales. Los abrazos que quedaron pendientes ayer en Las Gaunas equiparan a empresarios ricos con comerciantes y repartidores. A médicos, pacientes y personas en lista de espera. A profesores y estudiantes. A gente hermosa con autenticos hijos de satanás. ¡El fútbol es así!

El sentimiento de pertenencia a un club trasciende más allá de la razón. Los colores, un camino a seguir y un hombro en el que apoyarse lo hacen realidad. Hay algo innato, primitivo, visceral, primario, que une a Manolo en Brasil, a mi amigo Santiago que lloró el domingo en León, y a los que llenaron la ciudad de blanco y rojo. Piel de gallina en la República Argentina y garganta arenosa en Las Gaunas.

A Abadía, Tato Abadía, le escuché decir el viernes pasado en un programa de radio que lo mejor del actual estadio de Las Gaunas es “que tiene todo el tiempo por delante para escribir su propia historia”. Una ruta que su predecesora, la tradicional Las Gaunas, completó hace años.

Este domingo se escribió un capítulo importante en esa nueva historia que está por cumplirse. Fue un drama. Nada de paños calientes. Un fracaso de un proyecto que no fue capaz de ser primero ni segundo en la liga regular, y que fracasó cuando tenía todo a su favor. Pero, de la misma manera, pudo reunir 14.000 almas en el campo. Y ese capital humano no puede faltar. No lo merecen.

#Argentina

 
For Latest Updates Follow us on Google News
 

PREV Hombre fue encontrado muerto en un edificio abandonado en Valparaíso: “Posible homicidio” – .
NEXT Una Eurocopa por todo lo alto