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Por Adriana Marroquín
– 25 de abril de 2024
Tribunal | Historias diarias | Homicidios | Juventud | Tiro | Víctimas |
Los fiscales en un juicio por asesinato juvenil decidieron calificar a un hombre como “testigo hostil”, diciendo que cambió sus declaraciones y evitó preguntas durante su testimonio.
El menor, un joven de 15 años, está acusado de homicidio en primer y segundo grado mientras estaba armado, agresión con intención de asesinar, agresión con intención de matar, portación de pistola sin licencia, posesión de un arma de fuego no registrada, y posesión de municiones, por su presunta participación en la muerte a tiros de Jihad Darden, de 27 años. El incidente ocurrió el 18 de diciembre de 2023 en la cuadra 5400 de Illinois Avenue, NW.
Durante las declaraciones iniciales de la fiscalía el 24 de abril, el abogado afirmó que el niño había llegado a Lucky Corner Store en la cuadra 5400 de Georgia Avenue, NW en los momentos previos al tiroteo. Entró a la tienda, interactuó con uno de los trabajadores y abandonó el lugar antes de abrir fuego contra Darden, que estaba con un amigo a la vuelta de la esquina, dijo el fiscal.
Según la fiscalía, el amigo de Darden, que estaba en posesión de su propia arma de fuego, le disparó al menor antes de llevar a Darden al hospital, donde sucumbió a sus heridas.
Después del tiroteo, el menor se apresuró a regresar a la casa de una mujer, donde supuestamente frecuentaba, antes de tomar un Uber hasta su casa en Maryland.
La fiscalía le dijo al juez del Tribunal Superior de DC, James Crowell, que las pruebas incluían imágenes de vigilancia, identificación y declaraciones de testigos, datos de las celdas y prendas de vestir del tirador que fueron recuperadas de la casa del acusado y de la casa de la mujer que frecuentaba.
Estos elementos serían pruebas clave que probarían más allá de toda duda razonable que el menor es responsable del asesinato, dijo el fiscal.
Los abogados defensores del niño, Amanda Epstein y Matt Besman, se reservaron el derecho de pronunciar sus declaraciones iniciales cuando presenten sus propias pruebas.
Durante el juicio, los fiscales llamaron al dueño de Lucky Corner Store, quien testificó que proporcionó al Departamento de Policía Metropolitana (MPD) evidencia en video de los momentos previos al incidente.
Sin embargo, el propietario, que habló a través de un intérprete, dijo que no estaba en la tienda el día del incidente.
Los fiscales cuestionaron su conocimiento de la identidad del sospechoso del tiroteo, que según él era difícil de determinar debido a la ropa que vestía el sospechoso, y agregaron que tiene múltiples compradores frecuentes.
Las imágenes de vigilancia muestran al sospechoso vistiendo una sudadera con capucha de camuflaje con cremallera hasta la barbilla, una mascarilla médica, un abrigo negro y zapatillas Jordan rojas y blancas. Las únicas partes visibles del tirador eran sus manos, ojos y frente.
Según el testigo, los agentes del MPD le mostraron al propietario imágenes de los amigos del acusado, con quienes frecuentaba la tienda, y de un familiar. Sin embargo, el propietario no pudo identificar a ninguno de ellos por su nombre.
A pesar de no saber sus nombres, en el tribunal identificó al acusado, no como el sospechoso, sino como un niño que frecuentaba su tienda.
Los fiscales decidieron llamarlo “testigo hostil”, alegando que estaba cambiando la información que había proporcionado previamente al MPD y evitando preguntas.
El juez Crowell no se pronunció sobre la solicitud.
Está previsto que las partes se vuelvan a reunir para el juicio el 25 de abril.
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